Fútbol
10 AÑOS EN 10 FOTOS | ¡Abran las canchas, preparen los papelitos… que vienen ellas!

Se cumplen 10 años de fútbol femenino en la Liga Regional de Río Cuarto.
El puntapié inicial fue en el 2014 y hay mucha historia por repasar. Pasaron torneos, equipos, jugadoras durante estos 10 años. Hay un montón de estadísticas, de datos curiosos que merecen, y tendrán, su lugar. Pero esta sección buscará ir a las imágenes.
Vamos a elegir 10 fotos. No por importancia de los momentos que se hayan registrado, si no por su belleza, por el impacto de la imagen como imagen, y los mundos que se abren cuando uno las observa. Y a partir de esas fotos surgirán 10 textos. Puede ser un ejercicio de escritura, puede ser un capricho, puede ser un modo de hablar de ciertas cosas, puede haber realidad, puede haber ficción, puede haber imaginación.
Puede haber lo que queramos que haya.
II | ¡Abran las canchas, preparen los papelitos… que vienen ellas!
Cuando tenía 9 años jugué al fútbol unos meses con el equipo masculino del Club Sportivo y Cultural Herlitzka. Me vestí con la remera azul y blanca, la del club de mi pueblo, de mi vida. La camiseta del club con el que aprendí de pasión. Era la única niña del equipo. Lo máximo que jugué fue un encuentro amistoso de infantiles en la cancha de Atlético Sampacho y lo que más recuerdo fue que me erré un penal. También los trofeos exhibidos en la cantina del club y las ganas de querer levantar uno. Pero también la emoción de sentirme jugadora de fútbol de verdad.
Después, jugué en el “Mauro Herlitzka” y en el “Monumental”, imaginados en el patio de mi casa. Todo fue imaginado desde el día en que no pude seguir más con los chicos, porque ingresaban a competir formalmente a la Liga Regional de Río Cuarto y ahí yo no podía estar, era solamente fútbol masculino.
Esto que voy a contar ya lo conté otras veces, pero lo voy a volver a contar acá. Y perdón por la repetición de palabras y la repetición de ideas. Y me estoy acordando ahora de uno de los últimos textos que leí del newsletter “Vueltas en la cama” de Imanol Subiela Salvo, uno de mis favoritos. “Al principio me sentí medio chanta, pero después dije lo que acabo de decir: uno no tiene muchas ideas y con dos o tres tenés que tirar toda la vida”.
Volvamos. Todo fue imaginado desde el día en que no pude seguir más con los chicos Jugaba sola a la pelota en el patio y relataba mis propios partidos imaginarios. Me vestía de futbolista, con ropa de River (de River Plate) obviamente, y salía afuera. Y yo iba siendo varios jugadores mientras corría con la pelota en los pies, me pasaba la pelota a mí misma, y hablaba “la lleva D´Alessandro, se la toca a Cavenaghi… Cavenaghi gooollll”. Quería que todo fuese lo más real posible para sentirme jugadora de verdad. Quería tener las medias altas y no entendía como hacían los jugadores que veía por la televisión para tenerlas así. Al principio me ponía unas medias del colegio y las subía, pero se me bajaban, y cuando las subía tampoco es que me llegaban hasta la rodilla. Después tuve mis primeras medias de fútbol y mis primeras canilleras de verdad. Y ahí entendí, las medias del colegio no eran para jugar al fútbol.
Ya pasaron un par de varios años de eso.
El 29 de abril de 2023 vi a una niña de 9 años hacer un gol, festejarlo con sus compañeras y largarse a llorar. Todo lo hizo siendo jugadora, jugadora de verdad, en su equipo de fútbol femenino, en el día que inició el primer Torneo Infanto Juvenil Femenino de la Liga Regional de Río Cuarto.
Ese día, quedaron fotos hermosas como registro. Una de mis favoritas es la que sacó mi amiga Pía en el partido inaugural del torneo. Salen a la cancha los dos equipos. De niñas, de fútbol femenino, salen a jugar por primera vez en este pedazo de tierra del mundo un partido oficial de categorías infantiles. Salen los dos equipos de la mano con Florencia Arizmendi, la árbitra, al medio. Hay sonrisas en todos los rostros que se ven y amo los papelitos, el humo, los globos. Si cerras los ojos, te juro que podes escuchar los aplausos, los gritos, el ruido de cancha. Mi gesto favorito es el de la niña atrás que sonríe como con vergüenza, llevando la cara hacia su hombro y que abre la mano derecha como queriendo atrapar los papelitos. ¡Es que mirá lo que son todos esos papelitos! ¡Imagínate entrar a una cancha así! Ese día, en este absurdo total que a veces es la vida, la muerte, el amor, el dolor, la economía explotada, y tantas cosas más… ese día, en este absurdo total, el mundo fue un lugar mejor. El mundo fue un abrazo de gol.
En 2019 publicamos el libro Miralas Gambetear y un capítulo contaba la historia de Candelaria, para hablar de la falta de desarrollo de fútbol femenino infantil. El 29 de abril de 2023, y muchos otros días de allí para acá, muchas Calendarias con distintos nombres y con distintas camisetas, fueron felices jugando a la pelota, siendo jugadoras de fútbol. Botines, canilleras, medias altas que se quedan altas, pantalón y remera del club. Papelitos, hinchada, aplausos. Una cancha y un fútbol en el medio. Así, Miralas Gambetear II va escribiendo uno de sus capítulos más hermosos.
Por Delfina Vettore
Foto: Pia González Righetto
- 10 AÑOS EN 10 FOTOS | I | La Fusión, los caprichos del fútbol… y de la vida
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