“‘Vaya al frente, Renato’: el lema que se hizo piel y empujó una campaña histórica”

Renato Cesarini fue, sin discusión, la gran revelación de la Primera División A 2025 de la Liga Regional de Río Cuarto. En su regreso a la máxima categoría tras el ascenso logrado en 2024, el “naranja” protagonizó una temporada que rozó lo épico y que quedó marcada por una frase que se transformó en identidad: “Vaya al frente, Renato”.

El equipo dirigido por Mariano Passero terminó tercero en el Torneo Apertura, fue subcampeón del Clausura tras caer en la final ante Toro Club de Coronel Moldes y cerró el año en el segundo lugar de la tabla anual, con 68 puntos, apenas uno menos que Ateneo Vecinos. Un rendimiento que superó cualquier expectativa inicial.

Renato Cesarini, un subcampeón que inscribió su lugar entre los grandes

Passero y uno de los referentes del plantel, Valentín Duco, pasaron por el streaming especial de Al Toque Deportes y repasaron los pilares de una campaña inolvidable, poniendo el foco en ese lema que acompañó al equipo durante todo el año.

Un año soñado, más allá de cualquier planificación

Al analizar el recorrido del equipo, Passero no ocultó su emoción por lo logrado y destacó el valor del grupo humano.

“Ser reconocido por el trabajo hecho nos llena de emoción y primero que nada tengo que agradecer al grupo de jugadores que nos representó durante todo el año. Hay que basarse en lo que fue nuestro paso en la B, desde ahí nos enfocamos en potenciar lo realizado”, explicó.

El entrenador reconoció que los números finales estuvieron muy por encima de lo proyectado.

“Es un campeonato totalmente soñado para nosotros, números totalmente alocados a la planificación propuesta a principio de año, porque las intenciones eran engrosar números”, remarcó.

“Vaya al frente, Renato”, un grito de lucha

Consultado por el significado del lema que se viralizó en redes sociales y se repitió tras cada partido, Passero explicó cómo nació y por qué terminó marcando al plantel.

“Se ha ido generando esa muletilla y pegó, se fue haciendo carne en el grupo. Este equipo supo cómo se atraviesan las adversidades”, señaló.

Y agregó el sentido profundo de la frase:

“El ‘vaya al frente’ significa la propuesta, lo que teníamos que ir a buscar en todos lados. Creo que por momentos se nos fue un poco la mano de ir tan al frente (risas), pero son circunstancias que tenés que atravesar. Es un lema de lucha y esfuerzo, se nos pegó en la piel y fue nuestro grito de lucha”.

Una idea clara, más allá de los nombres

Desde lo futbolístico, el DT explicó que la clave estuvo en sostener una base y una idea, pese a las dificultades.

“Sabíamos que teníamos una forma o una característica de jugadores. En el inicio de este año hemos apuntado a jugadores que nos aporten a esa idea”, sostuvo.

Las lesiones obligaron a modificar permanentemente el equipo, pero eso no alteró el funcionamiento colectivo.

“Durante la temporada hemos sufrido algunos golpes como las lesiones; sufrimos mucho la baja de Diego González en las finales, anteriormente las de Jorge Cazzola y Román Romagnoli, y todo eso nos fortaleció”, afirmó.

“Renato Cesarini nunca repitió equipo, o lo hizo muy poco durante todo el año, pero en la base construida estuvo la clave: no importaron nombres sino el funcionamiento colectivo”.

Pasión, obsesión y disfrute

Passero también habló de su vínculo personal con el fútbol y el desgaste que implicó competir todo el año.

“El amor por el fútbol nace adentro mío, no sé quién me lo inculcó. Es algo que me apasiona y sigo lo que pasa en todos los rincones. Es una obsesión que tengo porque no se me pase nada”.

Lejos de sentir cansancio, el entrenador aseguró que vivió el proceso con entusiasmo.

“En estos dos años que llevo acá nunca me sentí cansado, y eso que peleamos todo el tiempo los torneos, con mucho desgaste. Siempre me sentí motivado, disfrutamos el día a día con un grupo hermoso”.

La fuerza de los chicos del club

Para el DT, uno de los grandes puntos altos fue la base surgida de la institución.

“El gran punto alto fue la camada de chicos que son del club, los que se merecían una segunda oportunidad en la categoría. Ellos fueron el puntapié inicial para este éxito y cambiaron la imagen del club”.

Mirar al futuro con los pies en la tierra

Pensando en 2026, Passero fue claro respecto a los objetivos.

“El objetivo es estabilizarse en la A. Lo de este año fue un momento. Lo importante es apostar al proceso, que chicos como Vale Duco lleguen a jugar en Primera y que cada vez sean más”.

“Queremos que no sea una casualidad el resultado y acostumbrarnos a jugar partidos importantes que nos exijan constantemente”.

La mirada del vestuario

Desde el lado de los jugadores, Duco valoró el camino recorrido y el cambio de mentalidad.

“Esto es un esfuerzo de lo que se viene haciendo desde hace muchos años. Lo hecho ahora es fruto de ese trabajo. Los resultados en el primer campeonato fueron importantes y era algo histórico”.

Sobre su rol como referente, expresó:

“Lo siento de manera natural, soy alguien que salió del club y lo defiendo como si fuera mi casa. Tengo compañeros que piensan de la misma manera y eso es clave”.

El lateral izquierdo también explicó el impacto del lema dentro del campo.

“Ese ‘vaya al frente’ sirvió para perderle el respeto a los rivales. En el anterior paso por la A entramos con miedo y eso cambió este año. Propusimos otra cosa y se demostró en resultados y juego”.

Confianza y regularidad

Finalmente, Duco destacó el respaldo dirigencial y el trabajo del cuerpo técnico.

“La tranquilidad que nos transmitieron desde el presidente al cuerpo técnico fue clave para soltarnos y lograr regularidad”.

Y definió el perfil del entrenador:

“Mariano, al ser joven, sabe mucho del manejo de grupo. Es transparente y muy cercano al jugador. Eso te da una confianza tremenda y destaca mucho lo humano”.

Una temporada inolvidable, una identidad marcada y una frase que sintetizó todo: Renato fue al frente, sin miedo, y dejó su huella en el 2025.

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