Mariano Guerreiro: El refuerzo de Central Argentino que conmocionó el mercado de pases

“Se dieron algunos factores extrafutbolísticos”, es la frase que utiliza Mariano Guerreiro, el delantero de 28 años (el 20 de enero cumplirá los 29), surgido en las canteras del “Chaco” y que decidió dejar el fútbol profesional para volver a calzarse la camiseta de Central Argentino de La Carlota.

“Después de la pandemia, cuando me tuve que volver a Flandria, me costó mucho irme de (La) Carlota”, explica el jugador que acaba de conseguir el segundo ascenso que otorgaba el torneo de la Primera B Metropolitana a la Primera Nacional. En dicho certamen del 2021, el carlotense se calzó la camiseta de Flandria en 18 partidos y convirtió 4 goles.

“La (cuarentena obligatoria) pasé en La Carlota, fue la primera vez en 13 años que estuve más de un mes acá, me costó irme, me acostumbré a estar más tiempo con la familia y me fui porque era mi trabajo, pero en los últimos meses lo empezamos a hablar con mi señora, se fue haciendo más firme la idea y no veíamos con malos ojos la idea de venirnos, pero se tenían  que dar algunas cuestiones personales y económicas, que gracias a Dios se dieron”, continúa la explicación de cómo se fue gestando la vuelta al pago.

“Me llamó Emmanuel (Artusso, recientemente electo vicepresidente de Central Argentino), luego me junté a charlar con ‘Catra’ (Esteban Cortalezzi, quien se sumó este mes a Gustavo Rocha para conformar la dupla técnica que guiará los destinos del equipo en el Torneo Provincial y el de la Liga Regional de Fútbol de Canals), me contaron el proyecto del club, me gustó, y sumado a las ganas que ya había de quedarse en un lugar y dejar de moverse de un lado para otro, me terminó cerrando”, resume.

Guerreiro se fue de Central a Argentinos Juniors cuando tenía 12 años, a los 20 debutó en Primera  y luego se fue préstamo a Brown de Adrogué, donde jugó Nacional B. En su regreso a La Paternal consiguió el ascenso, de allí pasó a Instituto de Córdoba y posteriormente a Defensa y Justicia.

Tuvo su paso internacional en Blooming de Bolivia, con el que jugó Copa Sudamericana y regresó  para vestir las camisetas de Guillermo Brown de Puerto Madryn, Santamarina de Tandil, UAI Urquiza y Flandria, con el que ascendió a Primera Nacional.

 “Todos los años  los dirigentes se encargaban de decirme que las puertas del club estaban abiertas, que querían que algún día vuelva, y siempre les agradecía pero quedaba ahí, porque me interesaba mantenerme en el nivel profesional, y esta vez me llamó, primero le dije que no, que quería mantenerme 1 año más allá y en 15 días surgieron varias cosas en las que consideré que se tiene que dar así, ahí fue que me escribe ‘Catra’ y me junté a charlar pero con la decisión tomada”, agrega.

Sobre su actualidad, resume: “Hoy estoy contento,  empezando a pensar en Central”, y agrega un motivo familiar a la decisión: “Tengo 2 nenes, mi señora también es de acá, cuando uno anda solo o en pareja va para cualquier lado, pero ya ahora el más grande empieza el jardín y vamos a poder estar cerca de los seres queridos después de tantos años. La decisión te diría que es más por lo personal y afectivo que por lo futbolístico”.

• Durante su carrera invirtió en La Carlota, ¿era un anticipo de esto?
• Gracias a Dios las veces que he podido invertir algún peso lo hice acá, y eso también me da la tranquilidad de que puedo empezar una nueva vida con la familia.

• ¿Se puede decir que se retiró del fútbol profesional?
• Si, suena medio drástico porque cumplo 29 años y me quedan unos 6 o 7 más para seguir jugando, que lo voy a seguir haciendo, pero se pone en la balanza lo económico, lo profesional y lo afectivo y se empieza a inclinar. Siempre tomé las decisiones en lo que mejor pensé y no por el qué dirán y  esta vez consideré que es mejor quedarse en familia, más estable, que los nenes puedan ver a sus abuelos, a sus tíos y puedan crecer como lo hice yo.

Mariano vivió en La Carlota hasta los 12 años, mientras hacía inferiores en Central Argentino cursó la escuela primaria en el “Fortín Heroico” y realizó el primer año del secundario en “El Nacional”, para luego, con 12 años emigrar a Argentinos Juniors. “Con casi 29 y más que cumplidos los sueños y expectativas, así que puedo volver tranquilo de que logré lo que quise y hasta más”.

• Hubo varios partidos importantes en su carrera, pero ¿qué recuerda del debut con Brown de Adrogué en el Nacional B y con victoria sobre Independiente de Avellaneda?
• Lo primero fue el día del debut en Primera División, a los 3 meses me sale el préstamo a Brown, la primera fecha fue con Independiente en la cancha de ellos, un estadio lleno, fue un recuerdo hermoso y con la posibilidad de ganarlo.

• ¿Qué le dejó la figura de Pablo Vicó?
• Pablo es un personaje, cuando me lleva a mí a préstamo no me conocía nadie, de a poco fui ganando un lugar a medida que pasaban los partidos y él tuvo en cuenta que yo era un chico de apenas 20 años y siempre me cuidó, estuvo al lado mío, con un afecto especial, obvio que también me ayudó que pude convertir goles, entonces iba todo de la mano.

Es una especie rara dentro del fútbol, ya por ser un tipo que hace tantos años que está dentro del club, además saca resultados y hace un tiempo que está en la B Nacional como un equipo afirmado, dando pasos cortos pero firmes.

• Después de eso, ¿con qué se queda?
• Después, el haber jugado la Copa Sudamericana y el año que ascendemos con Argentinos Juniors y todos los jugadores de trayectoria que había, eso va a ser impagable, que el fútbol me haya regalado eso.

• ¿Quién te marcó más?
• Todos, eran grandes jugadores pero ha era un gran grupo, todos tenían algo distinto, el “Lobo” (Cristian) Ledesma, (Juan Román) Riquelme, (Matías) Caruso, (Adrián) Gabarini, que han jugado en muchos lados y la humildad y la forma en la que se manejaban a uno le dejó mucho como experiencia.

• En ese momento, ¿ya lo veía a Riquelme en el rol de hoy?
• No sé si en ese rol pero era sabido que una personalidad como esa tenía que estar en boca, es un tipo que sabe mucho, es palabra mayor y cualquiera que maneje al club a asea personas la tenés que tener, tendrá cosas buenas y malas paro es gente a la que tenés que tener siempre.

Dejando su trayectoria y mirando al frente, habla de lo que se viene, el Torneo Provincial en el que Central Argentino debutara el 23 de enero visitando a Defensores de San Marcos Sud por la primera fecha de la Zona 3: “El Provincial no es a lo que Central va a apostar de lleno, esto en un proyecto que recién arranca, va a llevar unos 4 0 5 años, hay gente nueva, este torneo tiene que estar bueno para que nos midamos y saber a qué altura estamos, pero tenemos que apuntar a la Liga (Regional de Fútbol de Canals) para salir campeones”.

“Después seguir trabajando, el año que viene volver a jugar el Provincial más afirmados y si las cosas salen bien, en algún momento entrar a un Regional Federal Amateur, va a llevar su tiempo, ojala sea lo antes posible”, comenta.

“Es un proyecto ambicioso, pero que está al alcance de Central por el estilo de club que es y su infraestructura. Hoy somos todos chicos del club, y con un par de cosas más que puedan pasar en los próximos años, Central se puede mover en un nivel superior al que está hoy”, asegura.

• ¿Notó en el plantel el golpe por haber perdido la final de la Liga?
• No, no encontré un plantel golpeado, al contrario, los veo ilusionados, contentos, de lo que lograron, no es poca cosa llegar a una final y más haciendo el torneo que habían hecho, son consientes de que tienen una base impecable a futuro, más allá de que obviamente querían ser campeones.

• ¿Con algunos había compartido plantel en las inferiores?
• Con dos, Maximiliano Garrido y con Edilio Madrid.

• ¿El proyecto lo involucra en alguna otra función más allá de futbolista?
• No, lo primero es como jugador de fútbol. En 6 meses termino el curso de técnico y veremos más adelante si me involucro de otra manera o armo algún proyecto personal aparte, es muy reciente pero me gustaría en el futuro involucrarme en la parte formativa.

Presentación desarrollada la semana pasada en a sede del club

Para el final agrega dos frases más que ayudan a entender el giro repentino que le dio a su carrera, una que marca su amor hacia Central: “Se puede llegar a entrar en la historia del club y eso sería algo muy lindo, voy más por ese lado que el haber mantenido la categoría, estas cosas ilusionan, quedar en la historia de un club es de lo más lindo que te puede pasar”.

En la otra deja en claro el cariño por la ciudad que lo vio nacer y su gente: “Venía cada 6 meses y me gusta ver siempre a la misma gente que está sentada en el mismo lugar o el que cruzas en bicicleta y te saluda, eso es lo lindo de La Carlota, eso es impagable, después de 14 años, sigo extrañando”.

Fotos: Prensa CABCA, Olé, FM Más
Video: Canal Local La Carlota
Redacción Al Toque