A 36 años del salvajismo “pirata”

Debido a la reestructuración planteada desde la intervención en la AFA, y la concreción del Torneo Nacional a partir de 1967, con la participación de equipos del interior del país, fue necesaria la realización de un Torneo Regional, para clasificar a los representantes de las Ligas del Interior para participar en el nuevo torneo.

Para el Nacional 1985, el Consejo Federal, programó el Torneo Regional, que se jugó en 6 grupos respetando zonas geográficas.

Como siempre se clasificaban en forma directa un equipo por cada liga del interior, a excepción de Córdoba que tenía dos.

En el caso de nuestra provincia, una plaza llegaba desde el torneo organizado por la Asociación Cordobesa y otra por el Torneo Provincial. Estudiantes, Belgrano, Alumni de Villa María, Unión San Vicente, Sportivo Belgrano de San Francisco, y otros tantos más se disputaban palo a palo esos lugares de privilegio.

El domingo 7 de octubre de 1984 fue una fecha difícil de olvidar para los amantes del fútbol de tierra adentro.

Estudiantes recibía a Belgrano de Córdoba para disputar la segunda final del torneo de la Asociación Cordobesa de Fútbol, que otorgaba media clasificación al Campeonato Nacional del 85.

La final de ida, disputada en Córdoba, había quedado para el “pirata” que doblegó al “celeste” por 3 a 0. En consecuencia, se armó una gran revolución y expectativa en la previa de la revancha, no sólo por el resultado adverso, sino también por el historial reciente y el gran plantel que tenía Estudiantes.

Como ya era costumbre, los famosos “piratas” del Siglo XX coparon las costas del río Cuarto. Provocaron destrozos y el ambiente comenzaba a enturbiarse. Un olor feo a rodeaba el estadio Ciudad de Río Cuarto.

Se sospechaba que Belgrano venía a hacer alboroto, quería suspender el duelo y mudar la localía de Estudiantes a Córdoba. Así fue que minutos antes del arranque del partido, comandados por su presidente – el polémico – Walter Splenger, los capitalinos rompieron el alambrado, ingresaron al campo de juego y avanzaron sobre la hinchada local.

Armados con palos y armas blancas comenzó la batalla campal. Belgrano atacaba, la policía reprimía. Estudiantes en el medio.

El saldo final de la gresca dejó a 15 heridos. Catorce de arma blanca y uno de bala: Hipólito “Poli” Coronel, de 23 años, debió ser intervenido quirúrgicamente para extraerle una bala que tenía alojada entre el torax y el abdomen. Al lado de Coronel estaba su gran amigo, “Cucú” Ordóñez, ambos parte de los viejo “Leones”, quien lo socorrió y lo ayudó a pasar el mal trago.

El saldo deportivo fue a favor de Belgrano. Que logró su cometido. El “pirata” no sufrió sanción alguna y recibió el premio mayor. El partido revancha finalmente se jugó en Córdoba capital y los de Alberdi ganaron 1 a 0 y se consagraron campeones de la Asociación Cordobesa de Fútbol.

El premio de Estudiantes vino después, pero en la cancha y en condiciones normales. Por las finales del Torneo Provincial, el “león” venció a Alumni en un doble partido. El primero se jugó en cancha de Instituto y fue victoria para los de Sturniolo por 2-1 con goles de Coleoni y Magallanes. Y el segundo -vaya jugada del destino- se jugó en la cancha de Belgrano y con gol de Cossio Estudiantes se clasificó a su tercer Nacional.

Fuentes: Marcelo López Tobares / Página Celeste y CEDAT (Centro de Documentación Al Toque)
Producción Al Toque TV