El equipo femenino de bochas que será nacional

El deporte de las bochas es uno de los más añejos que tiene la humanidad y tuvo como punto de creación el suelo italiano. Se estima que se juega desde 1783 y actualmente se practica en un amplio espectro de edades de ambos sexos, ya que se realizan diferentes torneos en categorías que van desde las preinfantiles hasta los veteranos.

En este deporte dos equipos formados por una, dos o tres personas deben ubicar las bochas (esferas) lo más cerca posible de un objeto previamente lanzado llamado bochín (esfera pequeña). Un equipo lanza la bocha primero, entonces, el objetivo del adversario será situar las suyas más cerca del bochín o quitar las esferas que le estorban.

Tomó mayor formalidad en el año 1985, cuando se crea la Confederación Mundial de Bochas, y es reconocida por el Comité Olímpico Internacional en 1986.

Con el paso de los años, la popularidad fue mayor en los países latinos como Argentina, Chile, Perú, México y Uruguay. La disciplina nació con predominancia masculina, aunque con el correr de las décadas la presencia de la mujer tomó su matiz.

Actualmente en la provincia de Córdoba hay más de 6000 jugadores y jugadoras federados y todo está regulado por la Federación. Una línea más abajo viene la Asociación Riocuartense, quien orienta a los jugadores, jueces, dirigentes, entrenadores de la región.

Es una de las disciplinas más elegidas por los adultos mayores, debido al espacio reducido que se trasladan los deportistas y a la sencillez de sus reglas. Aunque la puntería es la habilidad que más se necesita para las bochas, no es un requisito indispensable para disfrutar de la actividad, ya que también es un juego de estrategia y concentración.

Además de ser un deporte entretenido, los especialistas señalan que desarrolla las funciones mentales cognitivas como la atención, concentración y solución de problemas, junto con la capacidad de integrar el espacio y sus objetos en relación a uno mismo. Otro dato no menor, es que ayuda a mejorar el equilibrio y coordinación.

Por último, es necesario resaltar que más allá de los factores físicos y lúdicos, lo común entre los practicantes es que ofrece la oportunidad de socializar e interactuar en un ambiente amigable.

Bajo este ambiente reactiva funciones el Club Sportivo Maipú, entidad fundada el 15 de diciembre de 1939 y con sede en calle La Rioja al 954. La “V” azulada gestiona, hace y genera recursos en el reinicio de las actividades presenciales y tiene en funcionamiento todas sus disciplinas: entre ellas, las bochas.

Maipú marcó un antes y un después en bochas al convertirse en el primer club de la ciudad en contar con canchas sintéticas para la práctica. Todo esto gracias a padre e hijo Paniego – Miguel y Mario –, históricos colaboradores de la entidad.

En ese camino, de la integración, la lucha, la gestión y el emprendimiento, es que sigue funcionando el club, que ahora presentó una nueva buena con un equipo femenino de bochas que se las trae.

Carmén Cruceño, Eva Estévez y las hermanas Ivana y Laura Farías son habitué de Maipú, empezaron a jugar juntas desde hace más de dos años y entablan una relación de amistas, recreación y pasatiempo.

Este fin de semana estará representando a la institución en un encuentro nacional que se desarrollará en La Rioja. Más precisamente en el Club Social y Deportivo Los Pumas, donde equipos de todo el país harán cumbre.

La particularidad que tendrá la competencia que se desarrolla de viernes a domingo es que no presentará equipos mixtos, aunque sí enfrentará a hombres con mujeres (si es que el fizture lo indica), por categoría.

En los casos de Carmén, Eva, Ivana y Laura formarán dos equipos y competirán en la tercera categoría. Las jugadoras de Maipú viajaron este viernes a La Rioja y comenzarán a competir desde el sábado.

Cabe agregar que José Arias y Rodrigo Rossi representarán al Club Las Lilas en primera Categoría.

– ¿Cuáles son las primeras expectativas del viaje al Norte argentino?

– Eva Estévez: Las expectativas son las máximas. Nosotros vamos a participar en una tercera categoría dentro de un torneo nacional, que tendrá jugadores con roce internacional. Será una experiencia distinta para nosotras, porque no solemos ir tan lejos a competir. En total somos cuatro chicas, divididas en dos equipos, y una pareja de hombre que competirán en segunda categoría.

– ¿La particularidad la marca el tener que enfrentarse con hombres?

– Carmen Cruceño: Es un gusto especial, aunque todo pasa por la competencia dentro de la cancha, la rivalidad queda ahí. Los hacemos renegar un rato (risas). Dentro del ámbito hay un respeto absoluto hacia la mujer, nunca ha habido problemas ante la figura de la mujer en un deporte que por historia ha sido de ellos. Es una buena señal para que más de nosotras se sume a jugar bochas.

– ¿Hace cuánto comparten el deporte?

– C.C: Las cuatro juntas hace dos años que entrenamos en el club (Maipú), pero en mi caso hace más de 20 años que practico bochas, me acerqué por mi marido y después con el tiempo le fui agarrando el gustito y lo seguí.

– ¿Y por qué se volcaron a las bochas?

– E.E: Fue difícil practicar otro tipo de deportes 20 años atrás y en un pueblo como Jovita, de donde soy. Ocasionalmente un día me invitaron a un torneo mixto, donde tuvimos la suerte de ganar y eso me motivó a seguir compitiendo. Lo que más destaco de bochas es que es un deporte integral, abarca todas las edades y no distingue sexo.

– ¿Es importante tener talento previo?

C.C.: En la bocha no se nace con talento, es más práctica. Si entrenás dos o tres veces por semana vas a ir agarrando mucha más habilidad a que si vengo un solo día. Obviamente también depende mucho de la estrategia y de la viveza de cada jugador. Y pulso, dependiendo el tipo de cancha se prioriza la fuerza o la habilidad para arrimar.

– ¿Hay ventajas entre mujeres y hombres?

– C.C.: La ventaja de la mujer está en el arrime, tiene mucha más sensibilidad, intenta sacar puntos desde ahí. El hombre quizá depende mucho de la fuerza y desde ahí se luce, aunque hay destacados punteros (el que arrima).

– ¿Cómo ven el desarrollo de la disciplina a nivel local?

– E.E: Quizá las bochas tienen menor convocatoria porque no presentan mayor difusión. Además porque compite con otros deportes que son pasión de multitudes. Pero por intermedio de participaciones que vayamos sumando, experiencias y este tipo de entrevistas podemos fomentar mucho más la disciplina.

– ¿Y qué intentan hacer?

– E.E.: A nivel local intentamos hacer un circuito en la región. Nosotras competimos hace poquito en San Luis y nos encontramos con muchas mujeres, sobre todo de Villa Mercedes que tiene algo similar a lo que buscamos. En Maipú somos nosotras las que practicamos, aunque hay otros clubes como Las Lilas que tienen muchas más mujeres. Buscamos la constante vinculación entre nosotras e invitamos a que más se sumen.

– ¿Qué rol cumple el Club Maipú en ese marco?

– E.E: Desde el club tenemos un apoyo constante, nos ayudan en la difusión y en la búsqueda de recursos para poder competir y viajar. Tenemos la fortuna de practicar en un lindo ambiente y con buenas instalaciones. Actualmente somos cuatro mujeres las que venimos en un ámbito que siempre fue de hombres, eso no es interferencia para animarse a venir y probar condiciones. De eso se trata, de por lo menos animarse y disfrutar.

– La buena noticia es la de las habilitaciones…

C.C.: Esperemos que con estas habilitaciones vengan nuevos aires. Después de esta participación en La Rioja tenemos una invitación para ir a Villa María. Por el momento son las dos salidad programadas. Además tuvimos que suspender nuestro encuentro en julio pasado por el tema de la pandemia. Pero la intensión es aprovechar esta apertura, y mucho más esta época del año, donde no hace tanto calor y en los salones está bastante agradable.

Redacción Al Toque
Fotos: Al Toque