El futuro del tenis es hoy

Comenzar una carrera en cualquier deporte no es sencillo. Se requiere de muchas aptitudes, pero sobre todo de actitudes. Cada día se configura con un esfuerzo por hacer y estar más cerca de los objetivos.

Sin dudas, el tenis es un deporte que tiene mucho de complejo en cuanto a la parte competitiva para cualquier chico o chica que se inicie en la actividad. El acompañamiento y el desarrollo desde la edad infantil es la piedra fundamental.

En Tenis ProActivo, muchos niños y niñas comienzan a dar sus primeros pasos con la raqueta en la mano. Aprender los golpes, las reglas, los puntos. Pero hay muchas más cosas alrededor de lo estrictamente tenístico.

Uno de los entrenadores de Tenis ProActivo, Joaquín Florez, dialogó con Al Toque Deportes mano a mano y se refirió al proceso que significa alcanzar el alto rendimiento deportivo. Las metodologías de trabajo se repiensan todo el tiempo para lograr en los chicos el compromiso y diversión que el deporte les puede brindar.

– ¿Cómo se trabaja desde Tenis ProActivo con los más chicos?

– Primero y principal, en TPA uno de los pilares es enfocarse en la parte de menores. Para nosotros el desarrollo de los más chicos es algo esencial, es el futuro del deporte, de todo semillero de un club. Más allá de que se destaquen o no en el tenis, deportivamente van a ser ejemplos a seguir para los demás. No solo desde el rendimiento, sino en generar una disciplina y formación. Puede ser el ejemplo para otros compañeros, sus hijos el día que los tengan, o cualquier otra cosa para afrontar en la vida. De eso se trata el tenis, es una forma de vida. Formamos a los niños para aprender a tomar decisiones, para jugar, para divertirse. No solo lo vemos desde el alto rendimiento, sino que desde eso queremos instalar una forma de vida para aquellos que empiecen en TPA.

– ¿Qué significa alcanzar el alto rendimiento en el tenis?

– Lo que es el alto rendimiento es lo que más nos gusta por así decirlo. Sabemos lo importante que es, es otra manera de ver el tenis y de entrenar. Los entrenadores sabemos el fruto que nos ha dado. Es generar ciertos sacrificios -siempre desde la buena voluntad- para obtener resultados que sean diferentes a los demás, porque el alto rendimiento también lleva a eso, a destacarse por encima de los niveles convencionales.

– ¿Cómo se inculca eso a los chicos desde que comienzan a jugar?

– Nosotros para encarar eso primero trabajamos con niños desde los 4 años, y desde la parte de psicomotricidad inclusive desde antes. La idea es disfrutar del deporte, que el tenis sea un juego, un medio para socializar y hacer amigos. Muchos internos de TPA tenemos vida de club, así que consideramos que es un factor fundamental. No solo enseñamos dentro de la cancha, sino que buscamos que los chicos estén dentro del club, que tengan otras actividades siempre que se pueda. No solo se trata de jugar, es ver tenis, disfrutarlo, y eso solo va encarando una forma de vida que no se basa solamente en ir a entrenar y volverse a casa. Poco a poco eso lleva al alto rendimiento.

– ¿Qué sacrificios implica el alto rendimiento?

– Eso es entrenar todos los días, estar varias horas, levantarse más temprano de lo normal, tener ciertos compromisos. Para eso hay que estar preparado de antes, y creemos que esa fase previa hay que hacerla de manera descontracturada y divertida. Así se construye la pertenencia a un club, y después no demanda un gran peso las actividades. Creemos que desde la pasión y el entusiasmo siempre se llega.

– ¿Cómo se da el paso de iniciar la actividad a querer entrenarla y enfocarse en el tenis?

– Es cien por ciento motivación. Creo que a ningún niño le gusta hoy estar toda una hora pegándole a la pelota de drive sin ningún motivo lúdico, o algo que encienda esa llama interna que lo mantenga activo todas las clases. Se deben generar objetivos para que quiera venir antes de clases también a generar otros vínculos. Esas cosas van llevando al alto rendimiento, y solas te van enamorando del deporte. Después es decisión de uno mismo, empieza a darse con aquellos que quieran dar un poco más o se comprometen de otra manera. Creo que la gente que lo proyecta es porque se ha comprometido totalmente con el tenis. Desde TPA buscamos dejar todo para prender esa llama interna de cada alumno. Cuando hay que tomar esa decisión, algunos siguen y otros no, pero para ser sincero, del porcentaje que tenemos nadie nos ha fallado de querer menos clases, todos quieren y buscan más.

– Como entrenadores, ¿qué destacarías de su rol en esta formación?

– Cuando se genera una monotonía es cuando hay que reaccionar y activar la antena de los profes. El factor fundamental es que mantenemos esa motivación, la búsqueda de competencia y autosuperación. Ser competitivo con uno mismo es superar obstáculos o desafíos que hacemos con los chicos y el trabajo en equipo hace que el grupo se lleve hacia adelante. Son muchos los requisitos que hacen para que uno se mantenga interesado en esta actividad.

Fotos: Tenis ProActivo
Redacción Al Toque