El jujeño Romero, uno de los que promete

Una de las pocas y gratas noticias que hubo este domingo en la derrota de Estudiantes ante Quilmes por 2-0 en el juego válido a la tercera fecha de Primera Nacional fue la inclusión del pibe Francisco Romero en el mediocampo titular.

El nacido hace 22 años en Jujuy ocupó un lugar como volante ofensivo y auxilió en más de una oportunidad e inexorablemente las pérdidas producidas en el equipo. Romero fue titular por primera vez desde que está en Estudiantes, aunque es la segunda que integra la delegación luego de su convocatoria al partido por 32ºavos de final Copa Argentina ante Chaco For Ever en cancha de Atlético Rafaela.

Entre sus funciones ante el “cervecero” le tocó posicionarse al lado de un experimentado como Néstor Ortigoza. Mientras Nahuel Cainelli se recostó mucho más por derecha y David Muller colaboró en ofensiva, Romero fue uno de los ejes de creación, desequilibrio y recuperación. Pudo aplicar algo de su poderío físico y técnico en ciertos tramos de la primera parte.

Finalmente fue sustituido a los 17’ del complemento por el ex Atlanta Nicolás Talpone, uno de los que se perfila para ser titular en el puesto.

En lo que refiera a “Panchito” Romero,  se inició futbolísticamente en la escuela “los Piojitos” y posteriormente siguió con inferiores en Talleres de Perico de Jujuy. A los 14 años pasó a Belgrano de Córdoba y tres años después firmó su primer contrato profesional en 2019.

Cabe agregar que Leonardo Carol Madelón, técnico de turno en el “pirata”, lo llevó a la pretemporada que el plantel superior realizó en La Serena, Chile en 2019, aunque su rendimiento no fue el esperado y finalizó jugando en Reserva. Posteriormente con Sebastián «Gallego» Méndez como estratega fue cuatro veces al banco de suplentes en Primera.

En el medio del proceso en Belgrano de Córdoba sufrió la pérdida de su madre en 2016, situación que lo llevó a repensar si continuaba ejerciendo en la actividad. Anoticiados por la trágica pérdida, el vínculo cercano lo ayudó a juntar fuerzas y salir de la situación con ayuda psicológica y profesional.

«Pancho» Romero viene de una familia que respira fútbol. Es hijo de César, quien militó en Altos Hornos Zapla de Jujuy y tiene a dos hermanos mayores que juegan en la Liga local jujeña.

Finalmente Romero no pudo sostenerse en Belgrano. El jujeño fue con el «pirata» a jugar un torneo amistoso a Italia y allí despertó interés del Spal, aunque el traspaso no pudo concretarse.

Desde el 2020 Romero quedó en libertad de acción al finalizar su contrato con la entidad cordobesa y decidió retornar a su ciudad de origen. Con la camiseta de Atlético El Carmen disputó un par de partidos en el Torneo Regional Federal Amateur y por su amistad con Francisco Russo (ex hombre de Estudiantes con el que compartió inferiores en Belgrano) recaló en Río Cuarto.

«Panchito» estuvo dos meses a prueba en Asociación Atlética Estudiantes. Comenzó a entrenar con el selectivo local hasta que Marcelo Vázquez lo promovió al primer equipo y lo citó a un compromiso de Copa Argentina.

En aquel duelo ante Chaco For Ever (07/01/2021), Romero formó parte de una delegación alternativa de Estudiantes, ya que en su incursión en la pasada edición de Primera Nacional se jugaba el boleto a la final enfrentando a Agropecuario en la última fecha de la Zona A. El jujeño pudo sumar un puñado de minutos ingresando en el complemento.

Con el inicio de un nuevo proceso, Acuña lo utilizó de central en los amistosos, posición inédita para el jujeño.

Este pasado domingo, ante las urgencias del nuevo DT, Romero saltó como titular ante Quilmes, jugó en su posición natural de volante ofensivo y ya entró en la consideración del nuevo cuerpo técnico. Es uno de los tantos juveniles que suelen integrar la nómina, aunque no suman muchos minutos. Tales son los casos de Joaquín Bigo (segundo arquero), Valentín Laspina, Matías Montejano (lesionado), Gino Stefani (lesionado), Juan Roldán, Tomás Correa, entre otros.

Redacción Al Toque
Fotos: Al Toque