Más deportes
El vóley de Acción Juvenil y un domingo inolvidable
Las categorías formativas del club azul y blanco cerraron el torneo federado de la Asociación de Vóley del Sur de Córdoba con un hecho histórico: se consagraron campeonas en Sub-12, Sub-14, Sub-16 y Sub-18 con los equipos “Blanco”, y completaron el podio con los “Azul”. En una jornada repleta de familias, tribunas colmadas y emociones a flor de piel, el proyecto formativo mostró su esencia: formar grupos humanos antes que ganar partidos, y dejar que los resultados hablen después.
Hay domingos que no se asemejan a ningún otro. En el cierre del torneo federado de la Asociación de Vóley del Sur de Córdoba (AVUS), Acción Juvenil no solo compitió: escribió un capítulo propio en su historia deportiva. Desde la Sub-12 hasta la Sub-18, los equipos “Blanco” se coronaron campeones, mientras que los “Azul” se subieron al podio en tres categorías. Todo eso, en casa, con la cancha pintada de azul y blanco, y con la familia empujando cada punto desde la primera fila.

“Fue un fin de semana muy emocionante, se vivió todo muy a flor de piel. Había familia de todos los equipos de Acción Juvenil y de todos los que vinieron. Fue una jornada hermosísima”, dice Natalia Sánchez, coordinadora general de la disciplina. La frase funciona como fotografía: desde las primeras horas del domingo, la sede del club se transformó en un gimnasio lleno, con banderas y celulares preparados para registrar cada saque y cada abrazo.
Las más chicas y el vértigo de una tribuna completa
Hay una dimensión competitiva que no aparece en las planillas ni en las estadísticas: la de jugar por primera vez ante tanta gente. La Sub-12 lo sintió en el precalentamiento, cuando las chicas miraban de reojo a las tribunas colmadas. No es habitual para ellas —no todavía— convivir con ese ruido: aplausos, gritos, indicaciones, cámaras. Allí se jugó el primer set real del domingo.

“Las más chiquitas no están acostumbradas a tanta convocatoria de gente. Eso por momentos jugaba a favor y por momentos jugaba en contra”, cuenta Sánchez. El inicio fue tembloroso, con errores típicos de la edad. Pero apareció el contagio saludable: cuando una se animó, el resto siguió. Las que estaban afuera alentaron sin descanso, abrazaron cada punto y empujaron desde el banco.
No fue una final por el resultado. Fue una final por carácter: las niñas entendieron que también podían ganar con la tribuna toda encima.
Las mayores y un oficio que ya se nota
En Sub-16 y Sub-18 el juego tuvo otro ritmo. Las chicas ya saben manejar el escenario: han jugado torneos abiertos, han viajado, han sentido la presión de los momentos definitorios. Donde las más pequeñas se paralizan, ellas se fortalecen.

“Sub-16 y Sub-18 están más acostumbradas a este tipo de público, han jugado torneos abiertos”, reconoce Sánchez. Los partidos fueron peleados, de sets largos y puntos que levantaron al gimnasio entero. El club presentó dos equipos por categoría y los resultados fueron contundentes: campeonato para Acción Juvenil Blanco en todas las divisiones y tercer puesto para Acción Juvenil Azul en Sub-14, Sub-16 y Sub-18. “Acción Juvenil llenó el podio del torneo federado”, resume la coordinadora.
Una idea clara
En todo momento, Sánchez vuelve al mismo eje: el proyecto no se diseña para ganar finales, sino para formar grupos. “Nosotros hacemos mucho hincapié en las categorías formativas, que se generen grupos humanos lindos, con la familia apoyando. Que la familia se involucre en el deporte y que las chicas tengan buena integración en el equipo. Sabiendo esto, los resultados vienen solos”.
La premisa atraviesa cada entrenamiento: construir personas, acompañar procesos, entender el deporte como experiencia colectiva. “Nosotros formamos jugadores, personas y equipos. Los resultados son secundarios. Tuvimos la suerte de lograr el campeonato en todas las categorías, pero nos llena ver a los equipos funcionar como funcionaron”.

Y en ese punto, vuelve a emocionarse con las más pequeñas: “Las más chiquitas fueron las que más me movilizó: ver la técnica de juego, cómo se complementaban en la cancha, cómo alentaban las que estaban afuera. Fue muy emocionante”.
Hay clubes que celebran trofeos. Otros celebran proyectos. Acción Juvenil hizo las dos cosas al mismo tiempo. Un domingo inolvidable no tiene que ver solo con el marcador: tiene que ver con lo que queda cuando el gimnasio se vacía. Las chicas crecieron, el vóley se agigantó y el azul y blanco encontró una nueva forma de identidad.
Fotos: Javier Raiden
Redacción Al Toque
Este artículo fue posible a la autogestión de periodistas. Hoy necesitamos de vos. Te invitamos a que seas parte de la comunidad de Al Toque Deportes asociándote con un mínimo aporte mensual
-
Asociadoshace 1 díaDe una final a otra: el renacimiento de Javier Ferreira en un año que lo devolvió a la historia
-
Fútbolhace 5 díasNuestra Selección: crónica de un sueño que volvió a unir al fútbol local
-
Femeninohace 6 díasProvincial Femenino: Una goleadora para tomar Notta
-
Fútbolhace 4 díasSe definieron los árbitros para las revanchas de las semifinales del Clausura

