La dinastía Dutto sienta bases en Alberdi

El apellido Dutto siempre estuvo vinculado al Centro Cultural Alberdi como consecuencia de las grandes gestas que lograron Matías, como goleador, y Gonzalo, como semblanza en la defensa.

Los hermanos, ya retirados de la actividad, supieron recorrer cada rincón del estadio “mercedario” desde que eran niños. Tras formativas en el club de sus amores, vieron las grandes luces por intermedio de ascenso a la máxima divisional liguera y la histórica vuelta olímpica en 2017.

Matías se catapultó rápidamente como uno de los ídolos de Alberdi a fuerza de goles, Gonzalo se hizo muy querido y señalado por su entrega, temperamento y referencia para los más jóvenes. Es por eso que el simpatizante común del barrio popular aún los tiene en la retina y será muy difícil que esos recuerdos se les borren. Mucho menos ahora, que aparecen los herederos.

Los hijos y sobrinos comienzan a hacer mella en el club, sábado tras sábado suman minutos en las formativas y alguna que otra vez llegan a Reserva en jornada dominical. Aunque este pasado domingo uno de ellos ingresó a la lista histórica de Primera División.

Tomás Dutto (11/06/2006), hijo de Pablo (dirigente del club) y sobrino de Matías y Gonzalo, ingresó en el complemento en el juego ante Deportivo Municipal en Adelia María. El experimentado Jorge Grassi, que esta semana dejó de ser DT de Alberdi, apostó por las condiciones del juvenil de 15 años y lo mandó a la cancha para ser parte del triunfo a domicilio.

«Toto», como lo conocen los más cercanos, siguió los pasos de sus tíos, también es conocedor de cada espacio de «El Trampero» e intenta rubricar cada vez más un apellido que es gloria en Alberdi. Tomás ya sumó sus primeros minutos en la última fecha del Apertura de Primera A y va por los mismos objetivos en el Clausura.

En el «mercedario» hubo varias bajas en el plantel superior, como las de Maximiliano López, Joaquín Loser, Guillermo Puñet y Mauricio Flores, y parece ser que la apuesta hacia los canteranos se acentuará.

“En la familia estamos todos muy felices, si bien es muy chico, con todo lo que significa debutar con 15 años, vemos que tiene los pies sobre la tierra. Es muy aplicado a la hora de entrenar y al momento del entrenamiento invisible, que es el del esfuerzo. Él no tiene que superar ni igualar a nadie, simplemente tiene que dejar lo suyo en el club porque las condiciones las tiene. Ojalá nos dé muchas alegrías, al igual que todos los sobrinos que quedan, queremos que vean lo hermoso que es poder disfrutar de Alberdi”, dijo su tío Gonzalo.

Por su parte, el histórico goleador, Matías, sostuvo: “Le estuvimos hablando la noche anterior para tranquilizarlo, porque sabía las sensaciones que iba a tener por debutar en Primera. Estoy orgulloso de que siga el apellido en Alberdi, es fruto de las condiciones y de la voluntad que le pone para entrenar e intentar mejorar cada día. Estamos muy contentos como familia y lo disfrutamos. Que se siga escuchando nuestro nombre es un orgullo, esperemos que siga por varios años más porque detrás de ‘Toto’ vienen mis hijos y sobrinos”.

El adelanto lo pone Matías, quien avizora un gran futuro en el vínculo Dutto – Alberdi. Por detrás de Tomás viene Thiago, de 15 años e hijo del ex delantero. Ignacio, de 11 años, es el hermano de Tomás y el tercero en el legado. En cancha chica aparece Mateo, con menos edad y con la particularidad de ser arquero, en contraposición de Matías (su padre), romperredes por naturaleza.

En otra institución suma experiencia Lorenzo, hijo de Federico (hermano de Pablo, Matías y Gonzalo), quien se desempeña en Atenas. Aunque pronto lo repatriarán según los pensamientos de sus tíos, fanáticos “mercedarios” y orgullosos de su legado.

En detalle:

• Tomas Dutto (hijo de Pablo) ya debutó en Primera con 15 años.
• Thiago Dutto (hijo de Matías) se desempeña en juveniles con 15 años.
• Ignacio Dutto (hijo de Pablo), tiene 11 años y juega en inferiores.
• Mateo (hijo de Matías) es arquero en cancha chica.
• Lorenzo (hijo de Federico) juega en inferiores de Atenas.

Fotos: Gentileza Dianela Aguirre / Al Toque
Redacción Al Toque