Fútbol
La leyenda continúa: Cristian Oliveira, destinado a ser héroe de Belgrano
Lo hecho el domingo pasado por el misionero roza lo épico. Estaba desgarrado, entró unos minutos y le alcanzó para convertir y entregarle la segunda estrella al elenco de Vicuña Mackenna. Un deja vu de su actuación en 2019.
El robusto misionero no lo podía creer. Se lamentaba una y otra vez. Despotricaba. Por primera vez sentía la necesidad de darle patadas al aire. Primero había sufrido una lesión en una de sus manos. Poco tiempo después, desgarro bastante profundo en su cuádriceps izquierdo, lesión que le significó un pronóstico nada feliz. Pero no se cayó.
Cristian Emanuel Oliveira, ese gigante de 37 años nacido el 2 de agosto de 1986 luchó contra la adversidad y tuvo su capítulo de gloria en el campeonato de Belgrano de Vicuña Mackenna.
Casi como un cuento, de los que terminan con final feliz, el misionero estaba destinado a cerrar el último capítulo. «Ya ves cómo es la vida de caprichosa… da primero la espina, después la rosa…», diría el cantante Alberto Cortez.
Oliveira fue parte de la nómina que dio el DT Mario Vivaldi para visitar a Lutgardis Riveros por la última fecha del Clausura. En la planilla oficial portaba la número 18. No estaba para jugar, sino para dar empuje y aliento a sus compañeros desde el banco de suplentes. Su sola presencia ya bastaba para que el equipo tome el temperamento necesario en un partido de tamaña envergadura.
Pero las cosas no estaban saliendo tal cual lo planificado. Es que el compromiso disputado en Alcira Gigena ya había agotado los primeros 45 minutos y estaba 0 a 0. Lutgardis jugaba con 10 hombres por la expulsión tempranera de Franco López, y Belgrano se había quedado sin Federico Juárez, ayudante de campo de Vivaldi que se sobrepasó en la protesta ante el árbitro.
Para males, Acción Juvenil ganaba rápido. 2-0 ante Atlético Sampacho y le arrebataba el título a Belgrano.
Fue entonces que Mario Vivaldi miró hacia atrás y se decidió por el goleador. La carta final estaba en el banco. Rápidamente Oliveira se calzó la camiseta por encima de una pechera naranja, se ajustó al límite una venda en su cuádriceps izquierdo y enfiló hacia el centro del campo. Todo en muy poco tiempo. El cronómetro pasaba y su equipo se quedaba sin margen.
En el rival ya alertaban su presencia. El entrenador Claudio Valentín daba indicaciones a sus defensores y los ponía en permanente atención.
Las vueltas del fútbol y, especialmente, de este campeonato que tuvo un final impredecible, encontraron al aspirante a campeón buscando un triunfo ante uno de los equipos que ya había cerrado su año. Y claro, apareció Oliveira a los 23’ revoleando su capa de héroe en el área y, como si estuviera practicando en el living de su casa, hizo el gol que nunca desperdician los experimentados centrodelanteros. 1 a 0 y la sensación de alivio para los gestores del título.
Oliveira sabe que el destino siempre le respondió con un final feliz. El 19 de noviembre de 2019 fue quien sentenció el 3-0 de su Belgrano ante Atlético San Basilio que le posibilitó la primera estrella al “tricolor” en Liga Regional de Río Cuarto.
Casi cuatro años después, el 29 de octubre del 2023, volvió a ser tocado por la varita mágica y anotó su séptimo gol en el Clausura. El más importante de todos.
Posiblemente no esté en la Final Anual ante San Martín debido a la lesión que padece. Pero “El chino”, con seguridad, intentará sobreponerse para volver a ser el héroe “tricolor”.
Sensaciones del goleador
El Clausura ganado. “Nos mentalizamos en hacer un buen segundo torneo, se armó un grupo hermoso, con excelentes jugadores y ni hablar como personas. Esa unión nos fue haciendo fuertes, partido a partido hilvanamos triunfos y nos consagramos. El torneo fue espectacular, no recuerdo un campeón invicto desde que estoy jugando en esta Liga. Desde lo personal ‘El Partido’ era este, por las circunstancias en la que llegaba. Ahora queda disfrutar y mentalizarse en lo que viene”.
Su presencia ante Lutgardis. “Estaba hablado y estaba para unos 10/15 minutos. Verdaderamente no podía jugar por un desgarro bastante complejo, con anterioridad tuve una operación en la mano; y en los partidos decisivos casi que no pude sumar por esta gran molestia en el cuádriceps”
La definición en el 1-0. “Tenía que tener la mente fría, no habíamos tenido jugadas claras y me quedó justo. Por suerte recibí, la saque para un costado y pude pasar al arquero para definir solo frente al arco”.
Gráfico: Al Toque
Redacción Al Toque
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