Lautaro Casado se incorporó a Rovigo en el Top 10 italiano: “Vengo a ganar el Scudetto”

Lautaro Casado Sandri, ex jugador de Uru Cure, cambió de equipo en el Top 10 de Italia. El tercera línea selló su llegada a Rugby Rovigo Delta, equipo que fue subcampeón en el último certamen italiano.

Rovigo perdió la final del Top 10 de la temporada pasada ante el Petrarca Rugby de Diego Galetto, otro de los riocuartenses que juega en la máxima categoría del rugby italiano.

Junto a Casado también se sumó a Rovigo el cordobés Lautaro Bazán Vélez, medallista de bronce con Los Pumas Seven en los últimos Juegos Olímpicos de Tokio, y ex jugador de Córdoba Athletic.

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El riocuartense habló con Al Toque Deportes desde Rovigo, una ciudad al noreste italiano de casi 50.000 habitantes donde Casado debió mudarse para este nuevo desafío en su carrera.

– ¿Cómo se dio tu llegada al Rovigo?

– Principalmente, la llegada a Rovigo se dio a través de mi representante que se contactó con la dirigencia del club y el manager. Me hicieron saber el interés de Rovigo, y obviamente al ser un equipo tan grande e importante te hace parar las antenas. Una cosa llevó a la otra, desde el minuto cero se mostraron muy interesados y a uno lo seduce. El proyecto de Rovigo es ganar el campeonato y jugar al máximo nivel. El entrenador Allister Coetzee estuvo a cargo de los Springboks de Sudáfrica. Todo ese combo me hizo inclinar hacia Rovigo.

– ¿Qué te impulsó a irte de Viadana?

Nada me impulsó a irme de Viadana. Fueron motivos meramente deportivos, cambiar el estilo de vida y salir de la zona de confort. Tras dos años en Viadana, que me sentí como en casa, necesitaba buscar nuevos objetivos.

– ¿Cómo fue la adaptación a una nueva ciudad?

– La adaptación es más fácil por el hecho de que me manejo bien con el lenguaje, sé los horarios y costumbres, estoy muy adaptado al país en sí. Viniendo de Viadana, que es un pueblo chico y con varias limitaciones, pasar a una ciudad un poco más grande con todo a disposición facilita mucho más todo. Estoy muy contento con Rovigo porque es una ciudad relativamente chica que te ofrece absolutamente todo lo que tiene que ser una ciudad grande. Estoy en una zona hermosa y la adaptación con mi familia fue muy cómoda.

– ¿Qué fue lo que más te sorprendió de tu nuevo club?

– Cuando entré a Rovigo y me presentaron las instalaciones fue lo que más me impactó, sobre todo con su forma de trabajar. La gente, la disposición del staff, cuestiones de logística que me impresionaron. Por sobre todas las cosas, el nivel de locura y fanatismo con el que se vive el rugby acá. Lo toman como el fútbol en Argentina. Te conocen en todos lados, te frenan en el centro cuando caminas. Espero que sea un buen año porque imagino que las críticas serán duras si los resultados no acompañan.

– Rovigo es uno de los principales equipos del torneo, ¿te sedujo su actuación en los últimos años para sumarte? ¿Considerás que es un salto para vos?

– No lo consideraría un salto, sí un cambio de objetivos. Por ahí Viadana no estaba con la cabeza puesta en ganar el campeonato, sino en hacer una base a largo plazo. Rovigo tiene un grado de fanatismo que produce la presión y el privilegio de buscar salir campeón todos los años. Eso me sedujo desde lo deportivo, ganar el Scudetto.

– ¿Qué expectativas pones para este nuevo desafío y qué objetivos te marcas para la temporada que se viene?

– Las expectativas son las que se viene haciendo hace mucho tiempo acá en Rovigo. Seguir por ese lado, crecer mucho como jugador y como persona, esa es mi expectativa personal. Después en lo grupal, buscar el campeonato. Esta temporada no puede ser menos que las anteriores, la vara está alta. Será un lindo año.

Fotos: Viadana Rugby / Rugby Rovigo Delta
Redacción Al Toque