“Quiero plasmarles a las nuevas generaciones lo que aprendí”
Habib Baduy pasó por el desafío de realizar un balance del año, entre lo deportivo y lo laboral. El judoca rionegrino, radicado en Río Cuarto, se refirió al nuevo enfoque de su carrera y la posibilidad de transmitir el aprendizaje a los alumnos de su escuela.
Llega el mes de diciembre y con él, los resúmenes y
balances de fin de año. Los atletas tuvieron una temporada extraña y cuesta
realizar una recapitulación.
En este caso, Habib Baduy reflexionó sobre un 2020
que trajo muchos cambios. El judoca rionegrino comenzó con las competencias a
principio de año pero la pandemia frenó el calendario competitivo.
Este rumbo de los acontecimientos le permitió a Baduy
concentrarse en otros aspectos de su vida, como mejorar su escuela de judo y
enfocarse de lleno en su trabajo como kinesiólogo.
En este mano a mano, el Atleta Al Toque repasa
la montaña rusa que significó el 2020 y menciona lo que espera para el 2021
– ¿Cómo finalizas este año en cuanto a lo deportivo?
– En lo deportivo, en febrero arranqué yéndome
a entrenar a Brasil, hice dos semanas de preparación y competí en el
Panamericano de Bariloche donde quedé quinto. En las competencias en las
cuales estuve tuve un balance bueno. Lamentablemente tuve dos lesiones en
las costillas y en el esternón, por lo que estuve bastante tiempo inactivo. Aproveché
la pandemia y el parate deportivo para enfocarme en mi profesión, desarrollar
el centro de rehabilitación y mis otros proyectos anexos a lo profesional.
– ¿Cómo te sentís desde lo mental?
– Mentalmente me siento mucho más maduro, veo cosas
que antes no veía. Estoy proyectando mucho más a futuro que antes, donde vivía
más el día a día. Creo que en Argentina el deporte amateur está muy poco
valorizado, por ende los deportistas están cada vez menos reconocidos por sus
ciudades, sus provincias y el país. Eso hace que uno se empiece a enfocar
en cosas extradeportivas. Uno tiene que vivir y pensar en el futuro, ver qué
vas a hacer y desarrollar las cosas a partir de las cuales vas a vivir toda tu
vida. Fue un año raro pero muy productivo, salieron cosas lindas y tengo
proyectos que son más lindos a nivel personal, social y deportivo.
– ¿Cómo concluís el año desde lo laboral, con qué
sensaciones?
– En lo laboral, cada vez mejor. Me veo
con mucha proyección. Es ganarse el día a día y encontrarse con querer ayudar a
las personas y agrandar más el abanico de tratamientos que uno puede brindar y las
soluciones que uno le puede dar a las personas, desde la kinesiología y desde
mi club de judo. Trato de desarrollar eso y expandirse, no hay que quedarse en
el molde.
– ¿Qué rescatas de este año tan extraño?
– Este año me hizo poner los pies sobre la
tierra, salir del piloto automático. Dejar de forzar cosas o seguir
empecinado con un proyecto que viene de hace tantos años y tratar de abrir nuevos
canales y oportunidades para mí y para las personas que quiero. Estabilizarme económicamente,
no depender de ningún ingreso que no sea el mío. Me hizo ver que puede pasar en
cualquier momento algo que te desestabilice mentalmente o económicamente. Uno
tiene que estar preparado y tener reservas para ese momento, porque no todo en
la vida está planificado. Siempre dije que la próxima pandemia me va a
agarrar mucho mejor parado y posicionado en todo aspecto.
– Si tuvieras que definir tu año en una palabra, ¿cuál
sería?
– Aprendizaje. Mi año fue de aprender
muchísimas cosas, sin esta pandemia no lo hubiese hecho. Me metí en otros deportes
de lleno que me dieron muchas satisfacciones. Si hubiese seguido la vida cotidiana
no habría salido de esa comodidad. Me animé a entrar en ambientes donde no soy
nadie. Mucho estudio para ir formándome. Estoy conforme con esta decisión,
me llevo vínculos sociales y laborales, proyección a futuro que me enriquece
mucho a nivel mental y que me da mucha felicidad.
– ¿Cómo te preparas para el comienzo de un nuevo año?
¿Qué objetivos pones en el 2021?
– Me preparo como vengo hace meses, no voy a frenar, sino que voy a continuar trabajando con mi profesión. Voy a tratar de ponerme en ritmo, ver si puedo encarar nuevos proyectos. Los objetivos del 2021 es ser feliz y poder seguir proyectando y aprendiendo cosas nuevas. En lo deportivo, todavía no tengo un objetivo claro, pero sí estoy proyectando con la escuela de judo, quiero abrir otra más. Quiero plasmar en las nuevas generaciones lo que aprendí en estos años. Se trata de poder enseñar lo que uno aprendió y dejarle el lugar a ellos que son los que vienen de abajo.