Se fue del país por una mejor calidad de vida y se reencontró con el fútbol

La decisión está tomada. Se van de la Argentina. Algunos tienen pasajes emitidos, visas en mano, inmuebles alquilados o vendidos, y la ilusión de encontrar una mejor oportunidad de vida en el exterior. La motivación no es simplemente económica, buscan mucho más que eso: estabilidad, seguridad y sobre todo bienestar.

En julio de 2020 la consultora Taquión Research Strategy hizo un relevamiento que señaló que ocho de cada diez argentinos con posibilidades de proyección se irían del país si tuvieran las condiciones para hacerlo. La muestra elegida -nivel socioeconómico alto y promedio 32 años- dio una respuesta clara: 3 de cada 4 consideró la opción de emigrar.

México, España, Italia, Dinamarca y Estados Unidos, los países preferidos. Tulum, Barcelona, Roma, Copenhague y Miami, las ciudades más elegidas.

Más allá de las estadísticas, ésta es una nueva historia de un riocuartense que decidió migrar hacia Tenerife, una de las islas que conforman Canarias, en busca de una mejor calidad de vida, trabajo y estabilidad económica.

Se trata de Diego Gallardo, joven de 24 años que desde julio del año pasado está en el exterior. El defensor que surgió en Centro Cultural Alberdi y jugó desde 2011 a 2017 en Estudiantes buscó un nuevo rumbo junto a su esposa Laura, encontró trabajo en el emprendedurismo digital y en el camino decidió volver a jugar al fútbol.

“Llegamos en julio con mi esposa buscando algo mejor para nosotros, desde el trabajo y una mejor calidad de vida. Un día pasé por frente de un club y sin saber bien qué era, ni el nombre, decidí entrar y probar suerte. Las pruebas fueron con el campeonato ya empezado y con el plantel completo, por eso me dijeron que tenía que mostrar mejor nivel de los que ya estaban para quedarme. Eso no pasó”, comenzó contando Gallardo.

“Entonces surgieron tres propuestas, de tres clubes diferentes, para sumarme a una categoría menor. Fue como empezar a jugar en la Liga de allá (Río Cuarto), se llama la Preferente de Tenerife y el club donde estoy es el UD Ibarra”, continuó.

La Unión Deportiva Ibarra, también conocida como Tenerife Sur Ibarra por motivos de patrocinio, es un club de fútbol de la localidad de Las Galletas, aunque con sede en el cercano barrio de El Fraile, en el municipio de Arona, en la provincia de Santa Cruz de Tenerife – España. El club fundado en 1969 y es uno de los equipos con más participaciones en el grupo canario de la Tercera División española.

La entidad donde milita el riocuartense Gallardo se ubica en Tenerife, una isla del océano Atlántico perteneciente a la comunidad autónoma española de Canarias. Junto a La Palma, La Gomera y El Hierro conforma la provincia de Santa Cruz de Tenerife.

Este sábado el equipo de Gallardo jugará la semifinal de la Regional Preferente ante el Atlético Tacoronte, con objetivo a acceder a las finales por el ascenso.

“Ahora estamos sobre el cierre de la temporada, el sábado (por hoy) jugamos una de las llaves de playoffs. Si se nos da estaremos a cuatro partidos del ascenso. El modo de jugar es similar a lo que es Río Cuarto, aunque todas las canchas tienen (césped) sintético, por lo que te tenés que adaptar de otra forma a la hora de jugar, correr, manejar tiempos, salidas y otras cosas más. Pero por suerte me he podido adaptar rápido y estoy contento por cómo nos está yendo”, detalló Gallardo.

Más allá de su – relativamente – pequeño tamaño, Tenerife presenta una liga local fuerte y un histórico estilo de juego similar a La Liga – Primera División española. En materia demográfica, cuenta con más de un millón de habitantes entre el terreno montañoso y de playa y es la isla más poblada de la Gran Canaria, uno de los estados autónomos (legislativamente hablando) que presenta España.

“La vida en Tenerife es muy tranquila, nosotros ya nos hemos adaptado en todo sentido. Por suerte tenemos trabajo y hemos podido asentarnos rápido, aunque tenemos relación con varios chicos que son de Río Cuarto y nos comentaron que hay otras ciudades y países donde se puede estar mejor aún”, adelantó Gallardo.

Y agregó: “En mi caso sé hablar con Bauti Marchini y Javi Martínez, que son chicos que hace más años que están en Europa y nos vamos comentando cómo la pasamos. Javi me ha dicho que en Italia se puede jugar en la misma categoría en la que estoy acá en Tenerife y vivir del fútbol. Asique es algo que estamos analizando, podríamos mudarnos un tiempo para allá”.

Su esposa Laura Marín también practicó deporte mientras vivía en Río Cuarto, ya que fue jugadora de hockey de Estudiantes y, según aseguró el propio Gallardo, tiene intenciones de volver al ruedo en una de las regiones lindantes a Tenerife.

El destino que tiene en mente la familia Gallardo – Marín es Italia. No tiene problemas en empezar de cero y luego crecer para desarrollar sus proyectos. Diego habla en plural porque está casado con Laura. Con los papeles necesarios para vivir en el exterior, en 2021 la familia hizo su primera experiencia en Tenerife con el simple propósito de probar suerte. Se instalaron, consiguieron trabajo, casa y hasta hicieron amigos. Aunque no se olvidan de los que quedaron acá, ni de su fútbol.

“Sigo siempre el fútbol de Río Cuarto, porque me quedaron un montón de amigos. Sé que (Atlético) San Basilio el otro día ganó y está peleando el torneo, lo sigo porque está Valentín Laspina. Lo mismo con Estudiantes en la Primera Nacional, está Joaquín Bigo en un gran momento y me da una felicidad muy grande, ojalá pueda seguir creciendo y juegue en un nivel más alto”, concluyó Gallardo.

Fotos: Gentileza Diego Gallardo
Redacción Al Toque