El sueño se le cumple a unos pocos y Victoria Miranda continuó hasta alcanzarlo

– ¿Qué te gustaría lograr con el hockey?

– La verdad, que es el sueño de toda chica que juega al hockey, llegar a Las Leonas.

Una Victoria Miranda de 13 años le responde así, con claridad, a Marcelino Gasseuy en una entrevista para Al Toque Deportes en el año 2013, en el medio de la cancha de hockey del Polideportivo Municipal n°2.

De uno de mis últimos partidos de hockey tengo una foto festejando un gol, señalando a Jose, una de mis alumnas que estaba del otro lado del alambrado. La autora del papelito que muestro pegao en mi palo y de todos los papelitos pegados en los palos de sus compañeras de Séptima División. La frase que Jose eligió regalarnos decía “Continuar hasta alcanzarlo”.

Pensé mucho en esa frase todos estos días en los que hablé con personas del entorno de Vicky Miranda. Escuché mucho la palabra resiliencia, la palabra insistir, también perseverancia, constancia, compromiso, disciplina.

Jose cuando hizo esos pepelitos para sus compañeras y su entrenadora debe haber tenido más o menos la misma edad que Vicky en aquella entrevista del 2013. Jose y todas sus compañeras de Séptima División en ese momento deben haber tenido el mismo sueño que Vicky, llegar a Las Leonas.

En aquel 2013 la Selección Argentina femenina de hockey sobre césped transitaba poco más de una década de años dorados que habían dado inicio a una mística, la mística de Las Leonas, surgida en el Mundial de Sydney 2000. En los últimos años, venían de ser Campeonas Mundiales en Rosario 2010 y de obtener la Medalla de Plata en los Juegos Olímpicos de Londres 2012.

El hockey empezó a crecer y a hacerse más popular en cada rincón del país. No solamente más niñas jugando, si no también con mejor infraestructura. La cancha sintética del Polideportivo Municipal, donde se ve a Vicky con 13 años, fue inaugurada en el año 2010. Antes, Vicky y las demás jugadoras de Universidad Nacional de Río Cuarto entrenaban y jugaban en la cancha de tierra del bajo del Campus “académico”.

De la cancha de tierra a los mejores estadios internacionales. Hay que decirlo, el sueño se le cumple a muy pocas de esas niñas llamadas Vicky, Jose, y tantos nombres. A una de las nuestras, nacida en la ciudad de Río Cuarto y con inicios en tierra, se le cumplió. En realidad, lo cumplió ella. Continuó hasta alcanzarlo.

Seis años después de aquella entrevista, en 2019, Miranda cumplió ese sueño y debutó en la Selección Mayor.

El debut oficial llegó el 26 de enero de 2019 en el marco de una fecha de la FIH Pro League, una de las competencias internacionales más importantes en el hockey. Argentina le ganó 2 a 0 a Bélgica en el Estadio Municipal de Córdoba. Un debut soñado, en su provincia, con familia, amigas y compañeras de Universidad en la tribuna.

La convocatoria a la Selección Mayor llegó después de un 2018 dorado para Miranda, que fue capitana de Las Leoncitas, selección junior, en los Juegos Olímpicos de la Juventud Buenos Aires 2018, certamen en el que Argentina se quedó con la medalla dorada.

Ahora, Miranda no solamente sigue cumpliendo el sueño de ser jugadora de Las Leonas, si no que formará parte con la Selección de la mayor cita a la que aspira un deportista de esta disciplina: los Juegos Olímpicos.

¿Qué hay detrás de alguien que, desde el interior del interior, logra cumplir el sueño de cientos, de miles, de chicas que alguna vez jugaron al hockey?

– Yo le digo siempre que aprendo de ella –dice su mamá Sira Sponer–. Que ella me enseña lo que es ir por un sueño y darlo todo. Y ella lo da todo, física, mental, espiritualmente, pone todo, porque es lo que quiere, está convencida. A veces los momentos duros son muy duros. Como quedar afuera de una lista, que le ha pasado muchas veces. A pesar de eso, siempre lo sigue intentando. Creo que confía mucho en ella. Después cuando pasan estas cosas todo tiene sentido.

– Vicky fue incorporando el interés y la pasión por el deporte desde muy chica –cuenta su papá Claudio Miranda–. Hizo natación, gimnasia artística en el Central Argentino, federada también. Paralelamente jugaba al hockey y tuvo que optar. Y siempre fue muy competitiva, estaba en su esencia el deseo de ganar. Querer ganar y querer hacer las cosas bien, entregar todo en lo que haga. Y lo que la muestra de cuerpo entero es el proceso que hizo. A los 12 años Santi Fuentes la convoca para empezar a entrenar en los seleccionados de Córdoba, empezamos a viajar tres o cuatro veces por semana a Córdoba y empezamos un derrotero que no lo paramos más, físico y económico. Había que salir para Córdoba saliendo de trabajar, nos llevábamos viandas para comer en el auto, volvíamos tarde, ella venía estudiando para el colegio con las luces del celular para el otro día. Y algunas veces cuando nosotros flaqueábamos, ella nos arrastraba. Nos decía que nosotros nos quedemos, que ella se iba en Lep. Muchas veces cuando volvíamos tarde le decíamos al otro día que se quede, que no vaya al colegio, y ella nos decía que no, que tenía que ir.

– No es que nosotros influimos en ella, ella nos arrastró a nosotros –agrega Sira–. Hasta el día de hoy, ahora nos arrastra a París. Yo siento eso, que nosotros vamos siempre atrás de ella, que ella tiene un impulso tremendo.

En todos estos años Miranda nunca dejó de ser parte del proceso de la Selección Nacional, pero alternó presencias y ausencias en convocatorias. Hasta este año, todas sus citaciones oficiales -no giras o partidos amistosos- fueron para partidos de la FIH Pro League, pero quedó al margen en listados para torneos como Juegos Panamericanos o Mundial. Por eso, hasta hace unos meses atrás, la idea de ser parte de los Juegos Olímpicos París 2024 era una ilusión que parecía muy lejana.

– Hubo una etapa de mucha cabeza para ella –comentó Claudio–. Toda esa etapa de no convocatorias después de haber debutado con Las Leonas. Nosotros siempre pensamos en ese momento en el que dan una lista y no te nombran, lo que se debe sentir. Han sido momentos durísimos, pero nunca ha bajado lo brazos. Si hay una palabra que la define, a ella y me parece que a todos los deportistas de alto rendimiento es resiliencia.

– Ella todos estos años le ha tocado no estar en las listas y estar entrenando igual. Seguir en el proceso, seguir entrenando, pero no quedas en las listas para los torneos importantes –agregó Sira–.

– Ella hace un año estaba afuera de los Juegos Olímpicos, por la realidad que tenía en ese momento. Pero el mayor mérito de ella en estos últimos meses ha sido que se adaptó a un nuevo puesto. El mayor mérito fue haber cambiado su chip en la cabeza para incorporar conceptos, gestos, técnica, táctica de un nuevo puesto, estando en el alto rendimiento. Que eso es lo difícil, porque no estás en un período de formación, estás compitiendo. Creo que, entre otras cosas, ahí está una de las claves. Se supo reinventar –sentenció su papá Claudio–.

La emoción floreció en Sira y Claudio al momento de contar cuando se enteraron de la convocatoria de su hija a los Juegos Olímpicos París 2024.

– Vicky nunca nos llama, es muy reservada –empezó a contar Sira–. Yo estaba trabajando a la mañana y me llama. Y yo pensé ´se debe haber lesionado o algo pasó´, porque la lista la iban a dar el martes siguiente y esto era jueves. Le dije: ´hija, ¿qué te pasó mi amor?, ¿pasó algo?, y ella dijo ‘mamá dieron lista y quedé´. Yo empecé a llorar. Fue todo hermoso. Se te pasa todo por la cabeza”.

– Fue llorar el primer impulso –expresó Claudio–. Es una descarga de energía muy grande, una gran alegría. Vicky la tenía muy difícil, hace ocho meses era un imposible. Pero en la vida y en el deporte hay pocas cosas imposibles. Entonces fue una gran alegría, un llanto compartido con ella. Y la satisfacción de saber que todo lo que ella hizo durante tantísimo tiempo tuvo ese reconocimiento, ese premio, que la pone en la mayor cita a la que aspira un deportista. Todo lo que ella atravesó para llegar a ese momento finalmente le entregó la mayor recompensa.

El “Verde”, la “Docta” y “Muni”, los equipos de su vida

Sin dudas, tres equipos han marcado el camino y la carrea de Victoria Miranda para llegar y mantenerse en Las Leonas. Universidad Nacional de Río Cuarto, los Seleccionado de la Federación Cordobesa y Club Ciudad de Buenos Aires.

Los inicios de Vicky fueron en Universidad. Una de sus referentes, que luego pasó a ser compañera y amiga, es María Emilia Alonso.

– La calve para llegar a donde está hoy es su perseverancia –dijo Memi–. Una chica que lo que se propone hace lo posible para lograrlo. Creo que ha bancado muchas cosas en este proceso, todo hace valorar mucho más lo que consiguió. Es para sacarse el sombrero, porque se lo propuso hace muchos años y hoy está a punto de vivir un sueño. A cualquier deportista le gustaría estar en el lugar que está ella.

Además, en cuánto a las virtudes como jugadora, Memi destacó la polifuncionalidad de Miranda.

– En donde la pones rinde. Acá ha jugado de delantera o de volante, en su club en Buenos Aires juega de volante, en la Selección la han puesto ahora de lateral, de defensora, y la verdad que tener esa variabilidad de posiciones y rendir siempre creo que es un plus. Sumado a su condición física y la maduración que ha tenido estos últimos años en Buenos Aires, casi haciéndose cargo del equipo, siendo capitana. Eso la ha hecho madurar mucho y es una cuestión a destacar.

Alonso también habló de lo que significa para el conjunto “académico” que una hija de la casa sea Olímpica.

– Es un orgullo para todo el club, para toda la institución, para todos los profes que fueron parte de su formación, para todas las jugadoras que compartimos cancha con ella. Es una felicidad enorme. Sabemos que hizo cada uno para aportar en el proceso de Vicky y que hoy esté ella allá es algo muy lindo, que nos llena de orgullo y nos pone muy felices.

Desde el conjunto “académico” también brindó su palabra Luciano Tuninetti, actual DT de la Primera División de Universidad, quién fuera el entrenador de Vicky en su etapa en Juveniles.

– Ella empezó a jugar en Sexta División teniendo 13, siendo de categoría inferior –contó Luciano–. En su momento su característica física sobrepasaba a compañeras, eso hizo que desde sus inicios pueda competir con chicas más grandes. Su condición física era muy buena y la naturalidad de sus gestos técnicos eran impresionantes. La explosividad y la capacidad de comprender rápido los ejercicios, las actividades, la capacidad táctica.

Tuninetti habló de las mayores virtudes que tuvo Vicky en sus años de formación deportiva en el hockey.

– Destaco la perseverancia. A ella se le metía algo en la cabeza y hasta no lograrlo no paraba. Como por ejemplo con gestos técnicos específicos. Naturalmente tenía condiciones impresionantes, pero creo que ha ido mejorando con el tiempo su condición técnica. En sus habilidades individuales no era la más brillante, pero sus gestos fueron mejorando en el día a día. Vicky tenía una actitud para los entrenamientos, para los partidos, para llegar temprano, para quedarse después de hora, que son las cosas que necesita un deportista para ser de alto rendimiento y para triunfar.

En esos inicios mientras jugaba en Universidad, apareció una persona clave para la carrera de Miranda. Alguien que sus padres definen como su descubridor: Santiago Fuentes, quién se desempeñó muchos años como entrenador en los seleccionados formativos de la Federación Cordobesa de Hockey y que actualmente trabaja en el hockey de Alemania.

– Fue medio casualidad, medio buscado –contó Fuentes sobre el momento en el que la conoció y decidió convocarla al proceso de la Selección provincial–. Recuerdo que la había visto a Vicky jugar y nos llamó mucho la atención su capacidad adentro de la cancha, destacaba también por su físico. Pusimos inmediatamente el ojo en ella. También por sus características de entendimiento de juego, su pasión, su entrega en el partido. A esa edad, en una Séptima División, ver jugadoras así llama la atención. Lo que más me llamó la atención fue su porte, su presencia adentro de la cancha.

Fuentes fue clave en el proceso formativo de Vicky en sus primeros años como parte de la Selección Cordobesa, que derivó luego en la primera convocatoria a nivel nacional. Hasta el día de hoy el entrenador mantiene vínculo con toda la familia Miranda y estará presente en París.

– Las claves que son el compromiso, la disciplina, la pasión que le pone a cada cosa que hace –expresó Fuentes–. Al margen de ser una buena jugadora es una gran persona. Todo su acompañamiento familiar, el tener que de temprana edad tener que hacer un escuerzo extra al resto, eso también son claves para llegar a algo tan importante como participar de un Juego Olímpico, ser un deportista olímpico. Al margen de su talento dentro de la cancha con un palo y una bocha, ese insistir, esa disciplina, ese entusiasmo, ese respeto por los procesos fueron claves. Para poder sobrellevar las presiones y todo lo que lleva estar en esos momentos, en esos equipos, es fundamental estar preparado fuera de la cancha. Y esas son las bases para que Vicky siga siendo una jugadora de la Selección, una Leona, y un ejemplo para las demás jugadoras.

Por último, Malena Cervino brindó su palabra para hablar de lo que significa Vicky, o en realidad, “la negra”, como le dicen allá, en Club Ciudad de Buenos Aires. Su club, su casa, desde que tomó la decisión de mudarse a Capital Federal, un paso clave para su carrera y para poder mantenerse en la Selección Nacional.

– Como compañera, y tengo la suerte de tenerla como amiga también, es una jugadora y una persona muy solidaria, muy compañera valga la redundancia –comenzó a describir Malena a Vicky–. Una líder sin lugar a dudas, y un ejemplo en muchas actitudes, en muchos hechos, como el nivel de juego, la presencia de todos los entrenamientos. Ella, aunque haya entrenado doble turno con Las Leonas está siempre con nosotras, apoyando, bancando, y se nota mucho su presencia.

Ver esta publicación en Instagram

Una publicación compartida de Plantel superior A (@psa_ciudad)

“Hormiga”, como la conocen todos sus allegados, ponderó también la insistencia de Vicky, ese “continuar hasta alcanzarlo” que remarcaron todos.

– Creo que su mayor virtud es la perseverancia, la constancia, el esfuerzo, la pasión. Considero que Vicky siguió, siguió y siguió después de muchas listas en las que no quedó, muchos resultados que no se le dieron. La realidad es que fueron más frustraciones, o más veces quedarse acá que viajar a ponerse la camiseta y jugar con Argentina que es lo más lindo que te da la Selección. Hubo un tiempo largo que no se le daba, que era todo entrenamiento. Y eso la describe, el merecimiento de este momento.

Miranda es actualmente la capitana de Ciudad de Buenos Aires, uno de los clubes más emblemáticos de Capital Federal. Además, es la única jugadora de la institución convocada a Las Leonas para París 2024. Desde “Muni” viven de manera muy especial todo este momento,

– La convocatoria desde el club considera que la vivimos como se vivió en su casa. En muchos sentidos siento que somos su familia acá, su casa, su lugar. Por algo también después de entrenar con Las Leonas viene a la noche con frío y todo con nosotras. El club genera eso, un lindo hogar. Todas acá la queremos, la apoyamos y se vivió como algo muy cercano, y con mucho amor por “la negra”.

Vicky, “la negra”, ya está en París. Es una de las 19 jugadoras que forman parte del equipo de Las Leonas. Es una de los 136 deportistas que representarán al país en la máxima cita del deporte mundial. Es una privilegiada de lo que está viviendo. O, mejor dicho, se ganó el privilegio.

El sueño se le cumple a unos pocos. Vicky Miranda continuó hasta alcanzarlo.

Por Delfina Vettore
Gráfico: Al Toque
Fotos: Archivo | Gentileza familia Miranda | adp.comunicacion