Héctor Abayay: “Me conformaba con entrar los últimos 10 minutos, pero me tocó ser titular y hacer goles”

Héctor “Pity” Abayay tiene 41 años y luego de haberse retirado hace 7, y pasar por distintos torneos libres, decidió regresar a la Liga Regional de Río Cuarto. En su vuelta a San Lorenzo de Bulnes, el puntero de la Zona Sur del Torneo de Primera B, marcó 2 goles en 3 partidos mostrando vigencia y olfato.

El “Pity” dejó su huella con las camisetas de Atlético Sampacho, donde fue campeón, y en el ascenso jugando para Confraternidad y Los Incas de Achiras. Con 34 años le había puesto punto final a su carrera y se transformó en jugador de torneos libres en la Liga de Profesionales, el Torneo TUS y el predio Ranqueles, sin embargo, este año decidió el regreso. “La verdad que me conformaba entrar los últimos 10 minutos a la cancha, con eso estaba más que agradecido, pero me tocó ser titular y la suerte de hacer goles”. Cuenta tras haber marcado en el triunfo 2 a 0 sobre Los Incas de Achiras y el pasado domingo frente a Social Recreativo, tanto con el que su equipo revirtió un 0-2 y se impuso 3 a 2 para quedar como líder de la Zona Sur.

¿Quién le propuso el regreso?

Yo solo, me sentía bien físicamente y me propuse jugar un año más, quise volver el año pasado y no pude, este año cuando me enteré que Gariboldi y Medina eran los DT de San Lorenzo, hablé con Gariboldi, al principio no me creía, charlamos, y después me dijo que sí.

¿Qué lo había hecho decidir por el retiro?

No hubo motivo, por ahí el cansancio de entrenar y viajar, dejé por eso, no hay excusa, solo que necesitaba un descanso.

¿Cómo vivió la previa al primer partido?

En el partido con (Herlitzka de Las) Vertientes (primera fecha) tuve sensaciones raras, de querer jugar, que me vaya bien y agradecido a la gente de Bulnes, a la gente del fútbol, a mis compañeros que me ayudan un montón y a dirigentes y DT, es como volver a empezar a jugar y los nervios también se sienten. No temores, porque no me propuse ser protagonista, solo fui con la idea de sumar en lo que me toque.

¿Qué objetivos se plantea?

Mi objetivo es que tengamos un buen año, que armemos un equipo competitivo y le hagamos partidos difíciles a todos los que enfrentemos, soy delantero, me gusta hacer goles, pero si no los hago, que los hagan mis compañeros. Tenemos un buen grupo, con gente experimentada. Vamos a ir partido a partido, todos los clubes se arman para pelear el campeonato y solo lo gana 1, pero no quiere decir que el que no salga campeón haya hecho las cosas mal.

El domingo le tocó definir un partido raro que antes de los 5’ perdían 2 a 0…

Se nos complicó apenas arrancamos con un penal y un tiro libre a los 2’ y a los 4’ y nos encontramos 2 a 0 en desventaja, menos mal que dentro de todo – como fueron rápido – tuvimos tiempo para remontar. El equipo no se cayó y siguió con la misma idea de jugar e ir para adelante.

Ganar un encuentro como ese, ¿suma en lo anímico?

Mirándolo con el diario del lunes, todavía no habíamos quedado en desventaja en un partido para saber cómo nos sentíamos para remontarla, y creo que nos fue bastante bien. Siempre y cuando mantengamos la misma idea, estando arriba, abajo o igualados en el marcador, de jugar la pelota, circular y atacar con la mayor cantidad de gente posible, sirvió.

7 puntos de 9, ¿están en lo que se habían planteado?

Nosotros planificamos en largo, la idea es ir encontrando el equipo partido tras partido, ahora se nos dieron los resultados y está bueno para laburar ganando, creo que más adelante vamos a ir encontrando un buen funcionamiento en todas las líneas en general.

¿Qué tienen por mejorar?

Nos estaría faltando un poco más de tenencia de la pelota, tranquilidad y tratar de manejar el firmo del partido, tenemos jugadores que lo pueden hacer, de calidad y renombre que ayudan al equipo.

Una familia bien futbolera

“Yo soy nativo de Bulnes, y a los 5 años nos fuimos a Sampacho”, cuenta de su historia de vida. Aclara que pese a ser una familia muy ligada al fútbol, “mi papá es primo hermano de ‘Roly’ Escudero (ex jugador de San Lorenzo de Almagro), pero no tiene ni idea de fútbol, nunca fue a la cancha. No sé de dónde salimos futboleros nosotros en referencia a sus 2 hermanos, Miguel, también ex jugador, y Enrique, árbitro.

“Todas las generaciones que vienen son todo fútbol”, agrega, y describe que su hijo Santiago juega en Atenas, Enrique es árbitro y tiene un hijo que juega en Confraternidad (Agustín) y otro en inferiores de Correos y Telecomunicaciones; y el hijo de Miguel (Cristian), también juega en Confraternidad.

Finalmente cuenta: “Sigo mucho a mi hijo, Me preguntó si estaba seguro (de volver a jugar) y me vino a ver el primer partido, sueño jugar con él, ahí si me retiro del todo, pasa que él está en Atenas y está muy difícil para mí llegar, pero no pierdo la esperanza que un día se dé, sería un orgullo. Por ahí los dirigentes de Atenas me llevan, aunque sea un partido, después que me corran ja ja”, dice a modo de broma, pero soñando con la posibilidad.

“Mi último partido en la Liga había sido para Los Incas contra Confraternidad, en Sampacho, en Reserva y el último gol no me lo acuerdo, pero imagino que fue con la camiseta de Los Incas”, dice sobre su anterior etapa como futbolista.

Fotos: Valeria Buzzini
Redacción Al Toque