Fútbol
Juan Cruz Romero: “Volvió el sentido de pertenencia al club después de haber sufrido mucho”
El capitán de Banda Norte repasa el ascenso y campeonato conseguidos en Primera B y resalta la importancia del grupo que se armó. Luego de haber sido campeón con el “verde” en las campañas de Primera A, el arquero se reencuentra con el éxito.
El 15 de octubre pasado Asociación Atlética Banda Norte rubricaba su gran campaña goleando 4-0 a Talleres de Las Acequias y consiguiendo el tan ansiado ascenso a Primera División A de Liga Regional de Río Cuarto. El partido correspondió a la fecha 17 de la Zona Campeonato de Primera B y significó el retorno del “verde” luego de 1268 días, desde aquel 22 de septiembre de 2019.
Nueve días después, los dirigidos por Facundo Ponce coronaron ese ascenso adjudicándose el título. Fue tras derrotar 2-1 a Sportivo Municipal en cancha de Centro Social Las Higueras.
El campeón de Primera B 2023 tuvo un cúmulo de motivos para terminar haciendo la campaña registrada. Una mancomunión entre dirigencia, cuerpo técnico, jugadores y simpatizantes. Las cuatro alas trazaron un paralelismo para lograr un objetivo en común.
Dentro de la cancha fue el mejor equipo que tuvo la categoría, con los jóvenes del club que llevaban tres temporadas jugando en la B y los de más experiencia que se alistaron para el presente año.
No alcanzan los dedos de las manos para enumerar a las figuras de este equipo, porque en algún momento fue Agustín Cuello, en otro el capitán Juan Romero, hubo instantes de Román Lucero, toda la defensa, y destellos de calidad de Mauricio Flores. Como así también la mano del entrenador Facundo Ponce, principal gestor de este grupo.
Cada uno en su momento, determinante en alguna ocasión, para terminar alcanzando la gloria.
Juan Cruz Romero es uno de sus máximos referentes que tiene este plantel. El arquero de 37 años surgió en Banda Norte y fue parte de los títulos logrados en 2005, 2009 y 2016. La época dorada del “verde”, con Guillermo Guendulain, Julio Turello y José Sebastián Echeverría como entrenadores.
El capitán de este equipo volvió para devolver al equipo de sus amores a la élite del fútbol regional. Es su cuarta etapa en la entidad tras haber registrado pasos por Sportivo Municipal, Independiente Dolores, Lautaro Roncedo, Herlitzka de Las Vertientes, Independencia de Levalle y Los Incas de Achiras.
Cabe agregar que en ese camino recorrido consiguió un título con Roncedo en 2012 y dos ascensos con Herlitzka (2019) y Los Incas (2021). Aunque sin dudas este nuevo salto tiene un sabor especial.
“Buscamos siempre el ascenso, haciendo un balance creo que el año viene siendo bueno en todos los sentidos. Hoy ya nos encontramos con la tranquilidad y alegría de devolver a Banda Norte al lugar que siempre le perteneció. Solamente queda disfrutar y mentalizarse en lo que vendrá el año que viene”, dice Romero.
¿Qué repaso hace de la campaña del ascenso?
J.C.R: “Arrancamos medio tibios, nos costó la dureza de la categoría, pero en esos momentos se notó el trabajo del cuerpo técnico y dirigentes. Tenemos mucha calidad y sólo había que plasmarla en base a la tranquilidad y el apoyo que podíamos darle los más grandes a los chicos. Creo que siempre intentamos jugar a otra cosa, por más que la B demande otra cosa, porque teníamos muy buen pie”.
¿Cuándo se dio cuenta de que podían ascender?
J.C.R: “No podíamos especular desde el protagonismo, por plantel e historia. Era una obligación llegar al objetivo. Considero que el mejor partido que hicimos fue el del ascenso contra Talleres, hicimos un gol de arranque, nos tranquilizamos y nos salió casi todo. Noté un aplomo grande del equipo que jugó a cancha llena. Ahí creo que dije ‘es nuestro’”.
¿Equipo más difícil que enfrentaron en este camino?
J.C.R: “El rival que nos complicó más fue Municipal, de hecho fue el que nos hizo goles en los dos partidos en el que nos enfrentamos. Sé que también estuvo el golpe con Universidad en la Primera Fase (derrota 6-2), pero el que estuvo en la cancha sabe que el resultado fue muy mentiroso. Cuando se perdió 6-2 volvimos a vernos las caras el martes y entendimos que fue un golpe temprano, lo manejamos con calma y salimos rápido. Fue el puntapié para todo lo bueno que se hizo después”.
Ya había logrado cosas importantes con Banda Norte, podría haberse sentido lleno ¿Qué lo motivó a volver?
J.C.R: “Hace tres años que tenía ganas de volver al club, después de la pandemia dejé Roncedo y esperaba esa oportunidad. En esa época no se dio por diferentes pensamientos, los cuales acepté y seguí mi carrera en Los Incas gracias a un llamado de Nicolás Morardo. Me sumé a Achiras y, como son las cosas del fútbol, peleamos y nos encontramos con un ascenso histórico. En 2023 ya estaba decidido, el año pasado presencié la promoción contra Juventud Unida y quería colaborar. En ese partido vi mucha gente sufriendo, llorando después de no poder ascender y decidí por dar una mano con Agustín (Cuello) y otros chicos. A partir de ahí construimos algo muy lindo como grupo, fuimos grandes y chicos juntos, un plantel de 40 personas sin diferencias Primera y reserva, me sentí muy cómodo, y esa fue la clave del éxito”.
¿Cree que la gente va a recordar a este equipo?
J.C.R: “En el ’97, cuando Banda Norte asciende de la C a la B, yo era uno de los chicos que entraba con los jugadores y los tenía de ídolos. Este campeonato me hace acordar a ese ascenso, porque volvió el sentido de pertenencia al club después de haber sufrido mucho”.
¿Qué será de su futuro?
J.C.R: “Hemos hablado de lo que puede venir, creo que puedo jugar un año más por cómo respondí en este ascenso, aunque sé que tengo que seguir poniéndome bien desde lo físico porque la A es distinta. Para el jugador de fútbol es importante lo anímico, y en ese sentido me siento de la mejor forma. La intención en jugar en la A con Banda Norte, es eso o no jugar más”.
En el sprint final de su carrera Juan Romero resurge como el ave fénix siendo fundamental en el Banda Norte campeón de Primera B en la temporada 2023. La pandemia casi lo retiró tras un paso trunco por Lautaro Roncedo, se llenó de fuerzas en un desafío desconocido en Los Incas de Achiras y se reencontró con la gloria en su casa, el Parque Sarmiento.
En 2024, posiblemente, inicie un nuevo sueño. Con el “verde” en la élite del fútbol regional y queriendo ser el que siempre fue.
Fotos: Al Toque
Redacción Al Toque
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