“Jugar de manera virtual con mi club es impresionante”
Franco Figueroa forma parte del equipo de FIFA Clubes Pro de Estudiantes, donde el “celeste” juega en la tercera categoría de la Liga IESA. También representa a Brown de Adrogué en la segunda división de la Liga EFA. Conocemos por dentro un mundo que para de crecer.
El planeta de los ESports está en constante crecimiento. Particularmente,
el videojuego de FIFA con su modalidad Clubes Pro (11 jugadores
que controlan a un futbolista cada uno) generó que muchas personas aficionadas
al videojuego se plantearan competir de manera profesional.
En Argentina existen dos ligas: la Liga IESA y la Liga
EFA, en donde diferentes clubes compiten por divisiones y categorías. No
todos los clubes se corresponden con un equipo de fútbol. Algunos representan
clubes ficticios y otros son oficialmente parte de los equipos, como es el caso
de River, Newell’s o Estudiantes de La Plata.
Pero hay otra manera de competir en estas ligas. Un equipo
puede solicitar la membresía de un club para representarlo, aunque el club no
intervenga financieramente o de cualquier otra manera en el equipo de ESports.
Este es el caso de Estudiantes de Río Cuarto. Un
grupo de amigos de Corral de Bustos crearon un equipo de Clubes Pro y
solicitaron la membresía al “celeste” para utilizar el nombre y la marca del
club.
Franco Figueroa es actualmente parte del equipo de Estudiantes
en la tercera división de la Liga IESA y juega como segundo marcador central.
Además, al ser dos Ligas diferentes, se incorporó al equipo de Brown de
Adrogué, que participa en la segunda categoría de la Liga EFA. Hincha del “celeste”,
contó cómo son las metodologías de juego y el crecimiento que tuvo la
disciplina en los últimos meses.
– ¿Cómo se forman los equipos con membresía de los clubes
de fútbol?
– En este caso, no es que los dirigentes de Estudiantes o
de Brown tengan algo que ver. Son chicos que pidieron la membresía del club al
cual quieren representar, esto se hace a través de una serie de papeleos con la
dirigencia del club. Tampoco es necesario que sea gente del club, ni socios. No
necesariamente tienen que participar gente del club. Los chicos de Corral de
Bustos vinieron a Río Cuarto para hacer todo ese trámite y por eso usamos el
nombre y la marca de Estudiantes, pero el club no maneja nada.
– Como hincha de Estudiantes, ¿qué se siente poder representar
al club?
– En Estudiantes soy el único hincha y socio que juega. Representar
aunque sea de manera virtual al club del cual soy hincha y donde me crié es muy
gratificante y lo hago con muchas ganas.
El avatar del futbolista virtual de Figueroa en Clubes Pro de FIFA.
– ¿Cómo es su metodología de juego?
– Se conforma un jugador por cada puesto. Es como el tradicional
“picadito” de los sábados, cada uno tiene su posición. Yo juego de 6 y tengo mi
compañero de zaga central. En cuanto al torneo, los lunes y miércoles se juega la
Liga y los martes y jueves la Copa Argentina. Cuando juego para Brown, los días
se invierten. Los viernes o fines de semana entrenamos. Somos catorce en la
plantilla, tenemos un grupo de Whatsapp donde nos vamos organizando y la
relación es muy buena. Después nos vemos la cara virtualmente cuando entrenamos
o jugamos. Tenemos chicos de México que viven en Estados Unidos, de Entre Ríos,
los chicos de Corral de Bustos, otro de Río Cuarto. Se busca responsabilidad,
compromiso y ser buena onda, porque de nada sirve la toxicidad a la hora de
jugar.
– ¿Cómo llegó a Estudiantes?
– Me llamó mucho la atención la forma de juego de FIFA de
Clubes Pro. Podes jugar así nomás, pero empecé a buscar clubes y jugar con más
gente de manera competitiva. Por intermedio de un amigo me metí en un club. Una
temporada dura aproximadamente un mes y medio y después se abre el mercado de
pases. Podes probarte en un club y que te fichen. Así llegué a Estudiantes
y a Brown.
Dado el gran crecimiento que tuvieron los ESports en los
últimos años, la Liga IESA y la Liga EFA cuentan ya con más equipos que las
divisiones de categorías del fútbol.
“Se llenó de clubes y gente que juega, cada provincia
tiene un representante. En la última categoría de IESA hay más de 100 equipos, y
en la de EFA más de 300. Empieza por medio de los clubes grandes, pero se
extendió mucho la red. Tuvo un gran crecimiento en el interior y es algo
imparable”, afirmó Figueroa.
– A diferencia del fútbol, uno puede jugar para un equipo
desde cualquier parte del mundo. ¿Qué ventajas tiene esto?
– La virtualidad es la ventaja. Podemos representar a
cualquier club siendo de otro lugar. A muchos les llama la atención en donde
están parados los clubes de fútbol. A algunos compañeros míos en Estudiantes
los incentivaba saber que es un club que está en la segunda división del fútbol
argentino y con chances de ascender a la Liga Profesional. Cada vez que se
abre un mercado de pases, es impresionante la cantidad de gente que busca club
para seguir progresando. Yo empecé en la última división, en la E, y ahora
estoy jugando en la C y en la B. La idea es seguir subiendo. Nosotros lo
hacemos de manera gratuita, pero no quiere decir que no se cobre. Hay muchos chicos
que cobran por partidos jugados. Jugadores de la primera categoría de IESA participan
también en equipos de Inglaterra y Suiza en donde cobran. Es impresionante el
mundo que generó el FIFA.
– No solo en FIFA, también otros videojuegos tienen la
misma lógica…
– Tal cual, inclusive con el tema de la visualización. Muchos
chicos juegan y ganan dinero por las visualizaciones por plataformas de
streaming. Llegó un punto que al que juega bien FIFA u otros juegos se les
paga. Por ejemplo, chicos de 13 años pueden llegar a jugar el Mundial de
Fortnite y pueden ganar miles de dólares por esto.
– ¿Cree que la pandemia favoreció a la inclusión de más gente en este mundo? – Estoy totalmente convencido de que la pandemia hizo que el mundo de los ESports crezca mucho. Fue un aliciente y una incentivación que, por ejemplo, Play Station haya bajado el precio de los juegos. Ayudó a que la gente se quede adentro y se entretenga. Se llenó mucho más, vengo jugando desde el año pasado y es impresionante el cambio que se ve.
Fotos: Gentileza Franco Figueroa Redacción Al Toque