Fútbol
Los protagonistas de Renato se refirieron al esfuerzo para lograr el objetivo
Tras conseguir el ascenso, en medio de una marea de gente, camisetas y banderas naranjas y negras, los protagonistas de la historia dejaron sus sensaciones ante el objetivo consumado. Renato Cesarini es de Primera A, 20 años después.
Renato Cesarini llegó a Primera División, fue en una doble final ante Universidad Nacional de Río Cuarto, con victoria 2 a 1 de visitante y 1 a 0 de local. El “naranja” se adjudicó el tercer ascenso y acompaña a Los Incas y Talleres de Las Acequias, quienes subieron de manera directa.
Claro está, los protagonistas destacaron el esfuerzo que significó llegar a este mano a mano para poder alcanzar el objetivo.
La ilusión de 24 equipos comenzó hace más de un año, la primera etapa estuvo dividida en 5 zonas, y Renato integró la Centro 1 en la que logró el pasaporte a la Zona Campeonato junto a Deportivo Río Cuarto.
En la fase Campeonato tuvo un arranque irregular y terminó en un sprint final con muy poco margen de error, que además demandó de fechas entre semana, en el que finalizó en la tercera posición, detrás de Los Incas de Achiras y Talleres de Las Acequias, y por encima de Banda Norte e Independiente Dolores de General Cabrera, que le discutieron hasta los últimos minutos esa posición que le otorgó el pasaporte a esta final.
En la Zona Campeonato fueron 22 partidos, de los cuales el “naranja” ganó 12, empató 5, y perdió 5, con 41 goles a favor y 23 en contra.
Pastre: “Lo tuvimos controlado desde que arrancó”
Facundo Pastre, uno de los referentes del plantel, autor del golazo que abrió la serie en la cancha de Universidad, destacó el esfuerzo de todo el plantel para entrenar y estar preparado de la mejor manera para este desafío: “Todos hemos dejado cosas de lado, creo que el esfuerzo se vio en el equipo, lo merecíamos más que nadie. Les agradezco a mis compañeros y a la gente que nos vino a ver, esto es para ellos”, aseguró.
En cuanto al desarrollo del juego, opinó: “Lo tuvimos controlado desde que arrancó, supimos a qué jugarlo y ahí está la fiesta que nos merecíamos”, dijo mientras señalaba a los parciales y recibía abrazos de cada uno que pasaba a su lado.
Como en la primera final tuvo un par de posibilidades de volverse a anotar en la red, lo que le hubiese permitido al equipo transitar con mayor tranquilidad los minutos finales, aunque sostuvo: “El gol es secundario, no importa quien lo haga, mirá lo que es esto, a mí no me importa el gol, es esto lo que me importa” y se volvió a abrazar con los fanáticos.
Cabral: “Tiré el centro para el que entrara”
Alejandro Cabral fue quien se vistió de héroe en esta oportunidad, cuando parecía que el primer tiempo se moría sin goles fue a pelear una pelota frente a los bancos, le dieron un metro de ventaja que fue letal, la punteó y la corrió, les ganó a tres marcadores y llegó hasta el fondo, allí enganchó y sacó un centro al área que encontró a Agustín Martina para poner el 1 a 0. “Pensé que se iba acá en la línea, pero no se fue (aclara enfáticamente ya que ese fue el reclamo de sus rivales tras el gol), la corrí hasta el último, di todo”, dijo y aceptó: “Tiré el centro para el que entrara, sinceramente cuando engancho y vuelvo, no vi quien estaba, saco el centro y justo aparecen Agus (Martina) y Benja (Orlando), pero la agarró Agus primero”.
Bozzer: “Hoy, mañana y pasado dejame disfrutar”
Gabriel Bozzer fue el padre de la criatura, el entrenador que ya cumplió 5 años en el cargo y con muestras de emoción en su rostro, comentó: “Esto tiene mucho que ver con la apuesta de Santiago (Mariscotti, el presidente del club), de bancar los procesos, algo que no pasa en otras ligas ni en el fútbol mundial, es rarísimo estar tanto tiempo, creo que con Fabio (Gutiérrez, el entrenador de Universidad) éramos los 2 más antiguos de la divisional, así que tiene mucho que ver Santiago en esto”.
“Fue un año súper complicado en todo sentido, atravesado por la pandemia, pero nosotros tenemos premio, imagínate todos los que sufrieron en este año complicadísimo y no tienen premio”, reflexionó, y estimó: “Hay que rever un montón de cosas, esto de jugar con chicos amateur, que no cobran un mango y venían a entrenar todos los días, para jugar los miércoles y domingos fue muy complicado, pero ya está. Siempre que se logra esto vale la pena”.
Como clave del ascenso consideró: “Lo nuestro siempre fue el ataque alto de los laterales, cambiamos el sistema en la ida con la ´Uni´, fuimos con línea de 5 para no perder ese ataque alto, hoy (por el domingo) rearmando con lo que nos había quedado, siguieron atacando y recuperamos la mitad gracias a al trabajo de los laterales, no sufrimos atrás y atacamos mucho más rápido”.
“De lo que vieron hoy, el plantel era mucho más rico, (hubo bajas) por un montón de cuestiones y todo lo que se sufrió. Teníamos un plantel extraordinario, no quiero desmerecer lo de Los Incas y lo de Talleres pero era un plantel fantástico, gracias a Dios por el trabajo de inferiores hoy se logra, pero era para estar en esta posición”, respondió al ser consultado si cuando empezó el torneo se veía en esta situación.
Bozzer también hizo referencia a cómo fueron las últimas semanas: “Nosotros, los jugadores y el cuerpo técnico, vivimos mucho más complicado las últimas 9 fechas que la final, yo lo viví mucho más tranquilo a pesar de que era con Universidad, que para mí es súper especial, pero en las otras teníamos que ganar y ganar, no nos podíamos relajar. No es que no fuimos a ganar a Universidad, pero no estábamos obligados”, explicó.
Y también detalló los minutos finales del último duelo: “No veía la hora de que terminara, no podíamos dejar de defender porque con 1 gol otra vez quedaban en partido, pero los chicos hicieron un trabajo bárbaro”, contó que fue momento de felicidad y que lo que se le vino a la mente fue “más que nada mis 2 mujeres en casa, todo el apoyo de Santiago y el trabajo de los chicos. Yo les decía que parte de esto lo logró el plantel de 2019 porque merecíamos esto, nos tocó la zona con (Herlitzka de Las) Vertientes que era el mejor, en 2018 nos tocó Everton (de coronel Moldes), que también fue el mejor, ahora quedamos terceros, pero se dio”.
Cuando se le consultó si ya piensa en la A, prefirió ser paciente: “Hoy, mañana y pasado dejame disfrutar de esto, porque nunca lo había logrado, había tenido otras oportunidades, como parte del cuerpo técnico, pero no como cabeza, así que quiero 2 o 3 días descansar”.
Finalmente dejó palabras hacia el plantel de Universidad, teniendo en cuenta que varios de los jugadores fueron dirigidos por él, y actualmente es coordinador de inferiores de la casa de altos estudios: “La Universidad me formó, yo soy un agradecido, y tocó así, que jugáramos con ellos, siempre es especial, es mi sentimiento, mi debilidad, así que les mando un abrazo para todos los chicos y que sigan así”, cerró.
Fotos: Al Toque
Redacción Al Toque
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