Fútbol
Ángela Lerena: “La cultura dejó de adjudicarle el fútbol solo al varón. Es una revolución masiva”
La reconocida periodista que actualmente trabaja en TNT Sports rememora sus inicios en el oficio, detalla lo que más la apasiona y recuerda Qatar 2022. Una nota en profundidad con una de las personalidades más exponentes del periodismo deportivo femenino.
Gustavo Grazioli
Periodista.
Angela Lerena tiene cinco años, está regresando a su casa en el transporte escolar que todos los días la lleva y la trae de la escuela. En el camino, un chico le pregunta de qué cuadro es y se queda sin respuesta porque desconoce de qué le están hablando. Hasta ese momento nunca le habían regalado una pelota ni había ido a la cancha ni se había puesto una camiseta de fútbol. Al bajar del micro, el interrogante quedó boyando en su cabeza y le consultó a uno de sus tíos qué significaba River y Boca.
La respuesta despertó el interés que iba a marcar el camino de su vida. A los 11 años dejó de buscar la revista Billiken que compraba todos los días en el kiosco de la esquina de la casa de sus abuelos y se mudó a las páginas de El Grafico. “Me estudiaba los posters de los equipos, jugador por jugador. Tenía la formación de los 20 equipos de primera de ese momento, pegada en mi ropero y me estudiaba todo”, dice Lerena a Al Toque Deportes.
Una vez concretado el colegio, decidió que iba a estudiar comunicación social y periodismo deportivo. No había otra opción que pudiera superar sus intereses. A los 19 años, mientras desarrollaba sus primeros pasos en las aulas de la facultad, fue a un programa de televisión a hablar de fútbol y la terminaron llamando de TyC Sports. Le dijeron que iba a ser una pasantía de 3 meses y se terminó quedando 13 años. De pasante a conductora del noticiero central del mediodía.
Pero no todo fue tan fácil en su vida. En los ’90 el periodismo deportivo no era un terreno fácil para la mujer y tuvo que saber resistir muchas situaciones en las que quisieron debilitarla para que cuelgue la toalla. “Al principio me costó mucho que me dejaran cubrir fútbol. Los chicos que entraron conmigo fueron enseguida a cubrir partidos de primera. A mí me tuvieron un tiempo con básquet, vóley. Después me hicieron hacer la B Metropolitana, la B Nacional. Me decían que me estaban cuidando. Lo que nos dicen siempre a las mujeres. Y pensaba: de qué me vas a cuidar si voy a la popular desde hace un montón”, cuenta.
Y agrega: “Con paciencia fui demostrando que lo podía hacer. Soy muy perseverante. Empecé a pedir permiso para acompañar a los cronistas a los entrenamientos. Después de hacer mi trabajo, me iba a los entrenamientos de River, Boca, Vélez, Racing. Así fui aprendiendo. Hasta que un día el Ruso (Eduardo) Ramenzoni me dijo que hiciera las notas. A partir de ahí empecé a pedir ser cronista y después de una prueba de dos meses, me asignaron Boca. Me tocó la mejor etapa. Estaba (Carlos) Bianchi. Fue como un posgrado en periodismo”.
Lerena hoy es una referente del periodismo deportivo. Es la primera mujer en cubrir campo de juego en las transmisiones de campeonatos de fútbol por televisión abierta y la primera en comentar partidos de la Selección Argentina. Este fin de semana se la verá en la cobertura de un nuevo superclásico, desde el campo de juego del estadio Monumental para la señal TNT Sports. Se la reconoce como una de las pioneras en todo este trayecto de su trabajo como comunicadora, en el que hubo que desmalezar distintos mandatos que imponían roles muy determinados a la mujer.
“Las mujeres somos más observadas y tenemos una vara más alta. Cuando me probaron para ver qué club me mandaban a cubrir, supe que no podía ser mediocre. Para que me dieran una oportunidad así me tenía que preparar. En el colegio no estudiaba tanto, pero en la facultad sí. Estudiaba para diez. Soy muy autoexigente conmigo y eso se combinó con esa vara alta que nos ponen a las mujeres. Sobre todo, en aquel momento” – explica y recuerda con una sonrisa la carta que le envió un televidente, que se dedicaba a observar todo lo que había hecho mal – “Hace quince años o más, una persona mandó una carta a TyC Sports escrita en una máquina de escribir, en donde marcaba un listado de todos mis errores. El tipo decía que en tal partido había dicho determinaba cosa que yo sostenía y que para él eran errores. O cosas que él hubiera hecho distinto. Ahí dije, guau que atención me están prestando”.
– De aquellos años a esta parte, ¿Qué cambios nota en el fútbol?
A.L: La cultura dejó de adjudicarle el fútbol solo al varón y se abrieron unas grietas que estamos aprovechando. Es una revolución masiva. Es todo. Son las mujeres jugando en las canchitas de los barrios, la presencia de clubes de fútbol femenino en todos lados. Ya no le pasa a ninguna niña que quiera jugar y no tenga donde. Y las mujeres de mi edad, de 30 para arriba, que tenían inconvenientes para jugar, hoy lo pueden hacer sin problemas.
– ¿Es una revolución?
– Sin dudas. Es revolucionario para todos. Qué más quiere el mundo del fútbol que tener más televidentes, más personas que vayan a la cancha, que compren la camiseta, más personas que vean la publicidad de la camiseta. Las marcas deportivas, todas, están apostando a la mujer para ganar un mercado nuevo.
Si va la mujer la cancha, va la familia. Es más sano. Antes a la popular iba medio tapada para que no se dieran cuenta que era mujer. Hoy veo que están haciendo el trencito, se matan de risa. Eso me parece recontra saludable para el fútbol.
– ¿Los jugadores de fútbol se están replanteando su masculinidad?
– Está habiendo un cambio en la forma en que los jugadores ven su masculinidad. En la pandemia, hubo tres clubes que me pidieron que vaya a dar charlas para su división reserva sobre distintos temas de género. Por ejemplo, el consentimiento. Tengo bastante estudiado esos temas. Les expliqué la violencia simbólica, física, económica. En los clubes hay un interés para que los chicos más jóvenes empiecen a revisar su masculinidad. Eso antes no pasaba.
– ¿Qué cuestiones ve que se están revisando más?
– Por ejemplo, el mandato cultural que tiene el hombre de no llorar, de no ser débil, de no necesitar ayuda y ser el macho proveedor, el que siempre puede. Esto hace daño no solo a los jugadores, a todos los hombres. Cuando hablamos de salud mental, aparece la imagen del Morro García y surgen varios casos de jugadores que no se animan a decir que están tristes, deprimidos, que no pueden o no les sale. Todos estos mandatos hacen daño. En el mundial fue muy notorio que hay cosas que de a poco se están modificando: vimos llorar a (Pablo) Aimar, a (Lionel) Scaloni y escuchamos al Dibu (Martínez) decir que tenía que hablar con su psicólogo. Se animan a mostrar a debilidad. El hombre también gana en esto de revisar los mandatos.
– ¿Qué es lo que más te gusta del fútbol?
– Que el de al lado es un par. Esas cosas me enseñaron un montón. También el fútbol es un juego que tiene técnica y táctica. Amo la táctica. Amo su historia y los distintos componentes que lo abarcan: psicológico, antropológico, sociológico. Se puede encararlo desde cualquier esfera y descubrir algo nuevo. Soy en relación al fútbol. Es mi identidad. Me despierto todos los días con ganas de trabajar. Es mi vida.
Lerena extiende el tiempo que tenía pautado para la nota y revela que le gustaría hacer el curso de directora técnica, aunque no sabe si dirigía un equipo por el componente especial que tiene el manejo de un grupo. Habla con entusiasmo y ofrece mostrar las planillas en las que prepara los partidos cuando hace campo de juego. Podría hablar de fútbol todo el día.
Recuerda los momentos que vivió en el último mundial y parece desdoblarse en su pasión por el periodismo y su fervor por la Selección, pero sin olvidarse de su obsesión a la hora de trabajar. “Para el mundial estudié un montón. Un videoanalista me ayudó recortándome muchas imágenes para que pudiera estudiar los rivales de Argentina, incluyendo los demás equipos que comenté. Hice como 20 partidos”, dice.
– ¿Lo que viviste en el último mundial fue una coronación a tu trayectoria?
– El tatuaje de la copa del mundo con las tres estrellas que tengo significa eso. Haber estado en la cancha en la que Messi salió campeón mundial, en la que Argentina salió campeón mundial y haber comentado ese partido, es una especie de premio a mi amor por el fútbol y el resultado de haberle dedicado la vida a esto desde que tengo cinco años.
Este artículo fue posible a la autogestión de periodistas. Hoy necesitamos de vos. Te invitamos a que seas parte de la comunidad de Al Toque Deportes asociándote con un mínimo aporte mensual
-
Espacio de marcahace 6 días
El Centro de Tomografía & Resonancia te brinda calidad y calidez en la atención médica
-
Asociadoshace 7 días
Atajó un penal y le dio el ascenso a Comunicaciones: Albano Ochoa
-
Asociadoshace 7 días
Atajó un penal y le dio el ascenso a Charrense: Rubén Rattazzi
-
Fútbolhace 3 días
Los nombres que estuvieron el primer día de pretemporada de Estudiantes